“Yo lo he dicho, vamos a gobernar hasta el último día”, afirmó, en alusión a las críticas recibidas por el momento en que decidió enviar el proyecto al parlamento.

La presidenta de la República, Michelle Bachelet firmó, la mañana de este martes, el proyecto de ley que creará una nueva constitución. La mandataria habló sobre el proceso constituyente realizado durante su gobierno y valoró los diálogos ciudadanos que se generaron. Al respecto, sostuvo que “no se trata partir de cero, Chile tiene una historia. Modifica la carta fundamental vigente pero mantiene muchas de sus disposiciones”, según consignó Pulso.

También destacó que la moción garantizará el derecho a la vivienda, educación gratuita, salud, seguridad social, huelga, igualdad salarial, al debido proceso, la protección de datos privados y al trabajo, temas que, entre otros, han estado en constante discusión a través de los últimos años.

Finalmente, Bachelet aclaró que, a pesar de que la constitución nueva modifica la vigente a nivel sustancial, se mantienen las reformas hechas a partir de 1989, las cuales, en su mayoría, provienen de la carta fundamental de 1925.

Así, Bachelet cumple con su gran promesa del presente período de gobierno: impulsar una nueva constitución para Chile.

De acuerdo a Pulso, la gran duda restante tiene relación con el hecho de que la presidenta se encuentra próxima a finalizar su mandato y ceder su cargo a Sebastián Piñera. Por lo tanto, viene al caso preguntarse si los efectos de este proceso constituyente se verán durante el gobierno venidero, y si se trabajará sobre las bases sentadas por Bachelet, o se propondrá un proyecto nuevo. Este será uno de los mayores desafíos que tendrá el gobierno de Piñera, en cuanto a su relación con la oposición.