El ex jefe comunal porteño analizó el resultado de la votación que le dio la primera mayoría en el territorio, pero también apuntó a la unidad para continuar el proceso de reformas.
“Cuando uno va a una elección, va para salir elegido. No debe haber ningún candidato que piense algo distinto. Yo aspiraba a estar dentro de los ocho electos y estimaba que podía estar dentro de los cuatro primeros, pero nunca pensé que iba a ser la primera mayoría (en el Distrito 20) ni el número de votos que finalmente obtuve”.
Ya pasados los días de la elección, el ex alcalde de Talcahuano y hoy diputado electo en la Región, Gastón Saavedra reflexiona en torno a un resultado que lo sorprendió.
Y, claro, porque así como él, dentro de las huestes políticas regionales pocos dudaban de la elección del otrora jefe comunal, no obstante, nadie apostaba que sería primera mayoría en el territorio, considerando la presencia de dos parlamentarios acostumbrados a sacar altas votaciones como José Miguel Ortiz (DC) y Enrique van Rysselberghe (UDI).
“Pensábamos que ellos disputarían los primeros lugares”, reconoció.
¿Qué pasó? Saavedra lo tiene claro: “Desde que salí de la alcaldía sostuve mil 896 reuniones. Es decir, tuve en promedio 5 reuniones por día. Recorrí el distrito dos veces de punta a punta, tanto así que llegué dos veces a la Isla Santa María. Me reuní con mucha gente, no asistí tanto a reuniones oficiales, preferí las reuniones cara a cara”.
Pero la anterior, no es la única razón de su alta votación. Saavedra no sólo reconoció, sino también agradeció el apoyo de la diputada Clemira Pacheco quien le abrió las puertas del actual Distrito 45 que seguirá representando hasta marzo del próximo año.
“Fue muy potente, porque ella tenía todo un anclaje social en el territorio, que cuando uno va a lugares apartados como lo hicimos nosotros, se encuentra con la fidelidad y agradecimiento del trabajo desarrollado en el territorio”, comentó.
– Le dejó la vara alta…
– Muy alta.
– Tendrá que responder a las organizaciones con las que ella trabajó.
– Así es. Y que bueno que exista eso, porque tendremos un pie en la base social, que es el soporte principal de la democracia.
Saavedra solo recibió el apoyo del alcalde de Chiguayante, Antonio Rivas (“vaya mi agradecimiento para él”, dijo), pero también, una vez electo, recibió críticas de algunos jefes comunales de su sector, como Boris Chamorro de Coronel, quien dijo a Diario Concepción que el diputado electo pertenecía a la vieja política, la misma con la que se codeaba en la comuna que encabeza. Pero Saavedra puso paños fríos, pues sabe que el desafío, en el corto plazo, tiene que estar centrado en la segunda vuelta presidencial.
“Lamento las declaraciones del alcalde Chamorro. Hoy es el momento de actuar en unidad y con responsabilidad. Hacernos recriminaciones por la prensa es justamente una práctica de la vieja política que tenemos que superar. Mi invitación es a trabajar y poner foco en resolver los problemas que aquejan a las personas”, opinó.
– Con los resultados de esta elección, se emparejó la cancha, al menos, a nivel regional. ¿Cree que La Nueva Mayoría adoptó la estrategia correcta?
– Nos equivocamos en ir divididos. Tuvimos dos candidatos presidenciales y de ahí para abajo. Entonces, ¿Qué se esperaba?
– Y ahora viene una nueva etapa, la segunda vuelta. ¿Cómo se revierte?
– En función de ese objetivo, que está a la vuelta de la esquina, tenemos que unirnos para garantizar a la ciudadanía seguir con este proceso de cambios garantizando derechos. La gran ganadora de esta elección fue la Presidenta Bachelet, porque todos los que decían que el país estaba hecho trizas y que esto no servía para nada… Ahí están los resultados. El candidato de la derecha, que decía eso, obtuvo un 36%.
– ¿Y cree usted que todos quienes votaron contra esa versión fatalista se puede unir en segunda vuelta?
– Esa es la visión que tenemos que aglutinar. Porque hay derechos que hoy se demandan, un nuevo sistema de seguridad social donde se incluyan las pensiones… Eso representa mi candidato Alejandro Guillier. Sí, nosotros queremos una nueva Ley de Pesca, no estoy dispuesto a entrar al Parlamento y avalar más de lo mismo. Tenemos que abordar el problema del agua potable, hay lugares donde se reclama aquello, como en Rafael, Talcamávida o Quilacoya. Ahí recién vamos a entrar en sintonía con la ciudadanía.