Aunque el tema fue puesto por uno de los candidatos, la mayoría de ellos ha manifestado su parecer. En la Región hay acuerdo en que cuatro años es muy poco, pero hay diferencias respecto a qué modificación es más conveniente.
En el debate presidencial organizado por la Asociación Nacional de la Prensa (ANP), la carta de Chile Vamos, Sebastián Piñera, dijo en medio de una de sus tantas intervenciones que un periodo presidencial de cuatro años era insuficiente.
Claro, la frase pasó desapercibida porque fueron otros los temas que llamaron la atención de los medios. No obstante, aumentar el periodo presidencial o en su defecto posibilitar la reelección una sola vez, es parte de un debate que jamás ha tenido punto final.
De hecho, el senador de la Circunscripción Cordillera, Víctor Pérez (UDI), comentó que esta es una discusión abierta al interior del bloque y del partido en el cual milita, pues no hay existe una idea que aglutine a todos en el sector.
Aunque, aseguró, hay acuerdo en que no basta con cuatro años.
“¿Dónde empieza la discusión? En si se sigue o no con el mismo régimen presidencial. En lo personal, soy partidario del régimen presidencial. Creo que el país no está preparado para un sistema diferente. Pero este (el del periodo presidencial) es un tema opinable, en los diálogos que hemos tenido pretendemos llegar a un acuerdo para proponérselo al país”, comentó.
Reconoció que es una idea, pero será planteada en la medida que el bloque tenga consenso.
Su colega en la Circunscripción Cordillera, Felipe Harboe (PPD), dijo que su opinión sobre el tema era pública. “Creo que un periodo presidencial de seis años sin reelección, ya que ello permite iniciar y concluir proyectos y obras dentro de un mismo Gobierno y se trasciende a las elecciones parlamentarias lo que daría mayor estabilidad política”, manifestó el congresista.
Analistas
Sobre el tema, el presidente de la Fundación Participa, Daniel Ibáñez, recordó que “prácticamente, todos los candidatos presidenciales coinciden en la necesidad de ampliar el período presidencial” y, desde ese punto de vista, dijo que la discusión iba en la dirección correcta.
“Un período de cuatro años como el actual impide que los gobiernos puedan concretar grandes reformas al tener un tiempo muy acotado de gestión, el que muchas veces además se ve afectado por los procesos electorales que se generan en medio del período. A nuestro juicio, establecer períodos muy largos, como los 8 años que establecía originalmente la Constitución de 1980, tampoco resulta prudente en un sistema excesivamente presidencialista como el nuestro”, sostuvo Ibáñez.
Agregó que “en cualquier caso, nos parece que esta discusión debe darse en el contexto del debate de Nueva Constitución, idealmente en una Asamblea Constituyente. Como Fundación nos inclinamos por la idea de cuatro años con reelección, pero además creemos necesario incorporar la figura del referéndum revocatorio. Esta última figura cobra mayor relevancia si finalmente se adopta un período de 6 años, pero insistimos que este debate debe darse en el seno de una Asamblea Constituyente”.
En opinión de Francisco Gatica, director de Corbiobío, cuatro años constituyen un período muy breve para consolidación de un proyecto político.
“En la elaboración de un proyecto complejo te tomas por lo menos dos años, pasando por instancias correspondientes, Cámara y Senado. Y cuando ya estás implementando medidas, ya comienzas a despedir”, comentó.
Gatica dijo que, desde ese punto de vista, “me hace mucho sentido que se mantengan los cuatro años, pero con la posibilidad de una reelección, como lo tiene de la democracia norteamericana. Ahí dejas abierta la oportunidad para que la ciudadanía pueda evaluar”.
Periodos anteriores
Tras el retorno de la democracia, se estableció un gobierno de cuatro años. Se suponía que sería el de transición. Los dos gobiernos posteriores, los de Eduardo Frei Ruiz-Tagle y Ricardo Lagos Escobar, se prolongaron por seis años.
Fue durante la administración del último de los mencionados, con los cambios efectuados a la Constitución que el periodo se volvió acortar en cuatro años, aunque en un principio se planteó la idea de aumentar el periodo a ocho años.
“Yo, al menos recuerdo, que uno de los argumentos que se pusieron sobre la mesa, apuntaba que coincidiera con la elección parlamentaria”, comentó el senador Pérez.