A una semana de que la Presidenta Michelle Bachelet firmara el decreto que de ley que creo la XVI Región de Ñuble, aún siguen las dudas en la forma en que deberán cohabitar con el Bío Bío.

Para algunos parlamentarios y dirigentes de la zona, esto es una especie de “independencia”, puesto que ya no dependen de Concepción para definir los recursos estatales, o los proyectos que se realizan y en qué comunas. Otros personeros esperan que este centralismo que se veía en el Bío Bío no se vea en Chillán. Mientras que la delegada presidencial anunció que habrá seremis en ciudades distintas a la capital regional.

En lo que todos concuerdan es en la necesidad de trabajar en una estrategia regional conjunta entre ambas zonas, para potenciar los aspectos positivos de ellas. Sobre este tema, el intendente Rodrigo Díaz va más allá y considera que un trabajo en comunión, lograría posicionar a la antigua Región del Bío Bío como uno de los polos más importantes del sur de Chile.

Situación que es compartida por Roberta Lama, gerente de Desarrolla Bío Bío, quien cree que la estrategia en la que se trabaje debe ser conjunta. “Nosotros incluimos la posibilidad de que ocurriera esta situación, por lo que la estrategia que tenemos actualmente es totalmente compatible y aplicable. Aquí ya tenemos un trabajo realizado y esperamos que ellos puedan replicar esta mirada públicoprivada allá. Como región agroalimentaria que es Ñuble, se debe potenciar esa actividad, mediante nuestros puertos y recintos”.

Roberta Lama es clara en que esta situación no representa una dependencia para ninguna de las regiones, sino que se logra una colaboración mutua.

Misma postura tiene el seremi de Economía de Bío Bío, Iván Valenzuela, quien cree que “el proceso de construcción se dé en la nueva región debe ser de la mano con Concepción, bajo lineamientos sólidos. Y para eso es necesaria la Estrategia de Desarrollo Regional; en ese sentido, ambas deben trabajar de forma conjunta. “Por ejemplo, si yo quiero potenciar a Ñuble como una zona agropecuaria, la demanda internacional de ella necesitará de Bío Bío. Por lo tanto, deben existir acuerdos de cooperación y colaboración mutuos”, recalca el economista.

Visión similar tiene Corbiobío, corporación que postula que la coordinación entre Ñuble y Bío Bío es un desafío, y que hay que buscar una forma eficiente de articular ambas regiones. “Hay que comenzar a pensar en una macroregión desde Talca hasta Temuco, potenciando lo mejor de nosotros, con nuestros propios recursos”, señaló el vicepresidente del organismo, Miguel Ruiz-Tagle.

Más pérdidas que ganancias

Desde Irade, su presidente, Eduardo Abuauad, estima que se debe trabajar como una región única. “Hay que desearles que les vaya bien con esta región, pero como conjunto, tenemos que ser más unidos que nunca. Nosotros, tenemos que transformarnos en un polo de inversiones desde el Maule hasta la Araucanía y debemos ser el polo de negocios del sur de Chile”, precisa.

En la asociación empresarial insisten en que con la separación de ambas regiones, las dos zonas perdieron, puesto que no ven desde donde el Gobierno va a sacar recursos para potenciar las inversiones en Ñuble.

En tanto, el presidente de la Sofofa, Bernardo Larraín Matte, estima que “una agenda de descentralización implica tener mejores regiones, en vez de más regiones, Y por muy legítimos que sean los intereses, el país se comienza fragmentar y no necesariamente eso va en apoyo a la descentralización. Ya lo dijo el presidente Lagos, para lograr una verdadera descentralización hay que hacer macroregiones. El real desafío es tener mejores regiones y no más regiones”.

Según los expertos, uno de los mayores desafíos que tendrá Ñuble será trazar su Estrategia Regional de Desarrollo, la que les permita mantenerse en el actual ritmo de trabajo que mantuvieron siendo una provincia del Bío Bío, pero esta además, debe permitir un trabajo conjunto para potenciar ambas zonas.