La paralización se desarrolló de manera pacífica y con fuerte compromiso de participación estudiantil.

Ya son 10 días los que lleva en toma la sede Talcahuano de la Universidad Técnica Federico Santa María en una manifestación destinada a aclarar presuntas irregularidades financieras que pudieran haber estado asociadas a la desvinculación del ex director, Alejandro Navarro, y de un grupo de trabajadores del plantel.

Por eso el paro de ayer realizado a nivel nacional y convocado por la Confech fue una oportunidad para los alumnos de la USM para poner sus demandas sobre la mesa.

“Nos encontramos en toma indefinida por la desvinculación de las máximas autoridades de nuestra sede que, creemos, se debe a irregularidades gravísimas. Se hizo insostenible la crisis en nuestra universidad”, manifestó 16 y vocero de la Confech.

Los estudiantes entregaron un petitorio de 6 puntos entre los que se cuentan transparencia, bienestar estudiantil e infraestructura. Uno de los argumentos que esgrime el colectivo de estudiantes que participan en la toma es que a diferencia del desarrollo que exhiben los otros campus de la institución, el local no ha tenido mejoras y ni desarrollos en los últimos años.

En cuanto a la paralización realizada ayer a nivel nacional, el vocero Confech explicó que se trató de una paralización reflexiva para abordar temas como la educación no sexista y el proyecto de universidades estatales que presentó el Ejecutivo.

“Estamos debatiendo para unificar un relato para ser presentado en el próximo Confech que va a ser el sábado en Iquique”.

Además confirmó para el 21 la realización de la tercera marcha estudiantil a nivel nacional.

El presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Concepción detalló que en el plantel cerca de 15 carreras adhirieron al paro para reflexionar en torno a las demandas. Explicó que a nivel país la respuesta a la petición de los alumnos para terminar con prácticas sexistas ha sido lenta y que las iniciativas existentes han sido levantadas desde el movimiento estudiantil (Solo la UdeC y la Católica de Santiago cuentan con comisiones de género).