Política

Vicepresidente ejecutivo del Cruch, Aldo Valle: “Si no se aprueba en general el proyecto será otra evidencia del deterioro y descrédito del sistema político del país”

El proyecto a la educación superior que se legisla hoy en la Cámara, ha tenido que sortear un complejo escenario, tropiezos y rechazos, principalmente dentro de su propia coalición, a dos años de ser presentado.

Por: Diario Concepción 17 de Abril 2017
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El proyecto a la educación superior que se legisla hoy en la Cámara, ha tenido que sortear un complejo escenario, tropiezos y rechazos, principalmente dentro de su propia coalición,  a dos años de ser presentado.

Mauro Álvarez S.
mauricio.alvarez@diarioconcepcion.cl

Como lamentable, catalogó Aldo Valle, vicepresidente del Consejo de Rectores (Cruch), el revés sufrido la semana pasada, el rechazo a la Reforma a la Educación, una de las principales transformaciones sociales comprometidas por la coalición de gobierno.

 “Si no se aprueba en general el proyecto de reforma a la educación superior, ello será otra evidencia del deterioro y descrédito del sistema político del país”, dejando en claro que de no aprobarse la iniciativa, no será responsabilidad del parlamento, sino más bien será el resultado más objetivo para la ciudadanía y por ello debería ser ponderado tanto por parte del gobierno, pero también por todos los actores políticos con la suficiente altura de miras.  

La iniciativa, que se ha transformado en un dolor de cabeza para el Ejecutivo, ya que no ha podido lograr crear consenso al interior de su propia coalición, hoy será votada en la Cámara, luego de nueve meses de haber sido ingresado el documento al Legislativo.

 “Hoy la legitimidad del sistema político y su capacidad para dar respuestas a urgentes y amplias demandas sociales, es la que está nuevamente en juego y saldrá perdiendo si se rechaza la idea de legislar”, expresó el vicepresidente del Cruch.

El proyecto emblema del Gobierno

La Reforma a la educación superior es una de las principales transformaciones sociales comprometidas por la coalición, pero “es lamentable que haya sido el último proyecto que el gobierno presentara y que no haya generado acuerdo ni siquiera dentro de la propia coalición” destacó, Aldo Valle.

El viernes la Presidenta de la República Michelle Bachelet interpeló a los parlamentarios para que aprueben la reforma a la educación superior, que se legislará hoy lunes: “hago un llamado a los parlamentarios a pensar en Chile y en las familias que ven con esperanza cómo sus hijos estudian gratuitamente. Los proyecto se pueden mejorar, pero no se puede retroceder”.

El mensaje recogido por La Tercera, estaba dirigido a los diputados de la Nueva Mayoría, principalmente a Camila Vallejos (PC), quien se abstuvo de votar,  provocando que la Comisión de Educación rechazara la idea de legislar el emblemático proyecto. Lo que se sumó al voto en contra de Giorgio Jackson (RD).
 

¿Hasta dónde se quiere estirar la cuerda?  

El vicepresidente ejecutivo del Cruch indicó: “La invitación del sistema político es a que sean las marchas y la movilización las que determinen la voluntad de cambio que las instituciones no tienen, porque estas prefieren que todo continúe tal como está.  El resultado será otra Universidad del Mar, otra ARCIS, varios miles más de endeudados por educación, debatiéndose entre   la frustración y el resentimiento. Esa sería la respuesta de quienes no han puesto una voluntad  de transformación verdadera y de quienes, transversalmente, sin declararlo prefieren el mercado como panacea de la vida colectiva”.

 

Fin al CAE como solución

“Si hay una voluntad clara de terminar con el CAE, como creo que existe, no se entiende por qué razón no hay desde ya un compromiso legislativo en ese sentido.  El fin de dicho crédito es una condición para que hablemos de reforma al sistema de financiamiento público, debe haber créditos mientras no sea posible la gratuidad universal, pero con características muy diferentes, desde luego solidario y sin participación de la banca”,  enfatizó Valle.

 

Un llamado a los legisladores

Si no se fortalece la educación pública y se sigue transfiriendo cuantiosos recursos a la oferta privada, sin las regulaciones y garantías que corresponda, tampoco se puede hablar de reforma a la educación superior.  

Si la voluntad política es evitar esos efectos con las indicaciones que se incorporan, lo mejor y más expedito es hacerlo explícito en términos políticos o legislativos desde ya.   

“Me permito hacer un llamado para que se produzca un acuerdo entre quienes están por la reforma y se apruebe en general dicho proyecto, si este desacuerdo permanece el daño a la educación y a la vida de miles de jóvenes seguirá siendo tan inmoral como irreversible”, finalizó el vicepresidente ejecutivo del Concejo de Rectores.

 

 

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