Lo estrecho de las votaciones hicieron que ni Miguel Rivera ni Gabriel Torres reconocieran el triunfo de la concejal que renunció al PPD.

Maximiliano Alarcón González
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Eran las ocho de la tarde y en las afueras del comando de Katherine Torres los adherentes ya celebraban. No eran muchas cuadras las que separaban el lugar de las sedes de Gabriel Torres y Miguel Rivera, donde los ambientes eran más silenciosos y de caras nerviosas.

Por un estrecho margen, las urnas arrojaron como resultado el triunfo de la hasta ahora concejala independiente de la comuna, Katherine Torres, seguida por el ex consejero regional de Renovación Nacional, Gabriel Torres, dejando en tercer lugar a Miguel Rivera (PPD) y como colista a la independiente Elicia Herrera.

El día partió normal. Las mesas se constituyeron temprano sin mayores problemas. Asimismo, el ambiente en general era de tranquilidad. Algunos locales con más movimiento que otros, pero el ánimo un tanto gris como reflejo del día nublado que tocó, sobre todo en los rostros de los vocales de mesa que tuvieron que trabajar.

Pasadas las seis de la tarde, una media hora después del cierre de mesas, se empezaban a dar las primeras proyecciones, las que sólo indicaban una estrecha pelea. De hecho, a las siete de la tarde, el margen era el más estrecho de la provincia. Katherine Torres marcaba un 32,8%, Gabriel Torres un 31,6% y Miguel Rivera un 31,1%, lo que no permitía proyectar a un ganador a esa hora. La tendencia se mantuvo hasta terminar el día, lo que dejó consecuencias.

El comando de Miguel Rivera estaba repleto, pero tenso y silencioso. En él no se veía al candidato y se decía que no daría declaraciones a la prensa, a eso de las 9 de la noche, cuando ya se proyectaba a la ex militante del PPD como ganadora. Sí salió el ex alcalde, Marcelo Rivera, quien además de responsabilizar al exceso de confianza de algunos que no habrían ido a votar por la lluvia, manifestó que impugnarán la elección, debido a que tienen dudas con la veracidad de los resultados en algunas mesas.

Por su parte, a Katherine Torres no se le vio eufórica por el triunfo, pero sí contenta, y señaló: "Estoy muy tranquila, con humildad principalmente. Esto es una muestra de que Hualpén se aburrió de la administración que tenía y quiere una gestión distinta, sin corrupción. Hoy asumimos ese desafío y desarrollaremos este proyecto con los vecinos".

Respecto del anuncio de impugnar los resultados, Katherine Torres indicó que "por eso mismo nosotros pedimos unos veedores al director regional del Servel. Él tiene el derecho a hacer lo que quiera, me imagino lo frustrado que está. Ellos tuvieron la posibilidad durante tres períodos pero hoy Hualpén dijo no más. Nosotros utilizaremos también todos los recursos que tenemos".

En tanto, con muchos adherentes en la sede de campaña, Gabriel Torres realizó una intensa reunión con su equipo más cercano, analizando la situación que los dejaban en segundo lugar. La principal duda de ellos recaía en que encontraban que había una importante diferencia entre los votos a la candidatura a alcalde y a los concejales del sector. Hoy se pronunciarían sobre qué harán.

En tanto, Elicia Herrera, desde temprano vio cómo era derrotada en las urnas. Acusó que hubo irregularidades, como una mujer que acusó que no pudo votar debido a que alguien lo habría hecho antes que ella. Además, señaló que hubo una anticampaña en su contra, en la que los comandos de los otros candidatos la dejaban fuera de la competencia anteriormente, señalando que los candidatos eran sólo tres y que ella se había sumado al riverismo, lo que siempre desmintió asegurando que ella era la única independiente de todos los aspirantes al municipio.

Lo cierto es que esta elección seguirá dando que hablar durante los días siguientes, en caso de que se concreten las acciones del riverismo.