El precandidato presidencial visitó Concepción para juntar firmas. Señala que su debilidad es ser menos conocido en regiones.

 

Maximiliano Alarcón González
maximiliano.alarcon@diarioconcepcion.cl

Hay algo que molestó a Manuel José Ossandón. En su bolsillo lleva una hoja con estadísticas de la última encuesta Cadem y la muestra cada vez que quiere asegurar que "la candidatura presidencial está abierta". En el papel dice que en Santiago, Sebastián Piñera marca 34 puntos y él 50; en tanto, en regiones, el ex presidente tiene 48 y él 30. "Esto quiere decir que donde me conocen gano, mi problema es que en regiones no me conocen", dice el senador que hace algunos meses renunció a Renovación Nacional.

Por este motivo visitó Concepción, donde asistió a la junta de firmas para validar su candidatura presidencial como independiente, además de visitar comunas de la Región del Bío Bío que no conocía. Busca empaparse de los temas de regiones, asegura. Ossandón junta firmas para tener la libertad de elegir si ser candidato presidencial independiente o por algún partido.

– Usted renunció a RN porque no sentía las garantías para optar a la candidatura.

– Creo que Chile Vamos está hecho para potenciar y proteger al candidato de la UDI, que es Piñera.

– Pero usted está considerado en las primarias de RN.

– Yo no voy a ir a ninguna primaria de RN porque no soy militante y no me corresponde. Yo estoy abierto a estudiar a ir a una primaria de Chile Vamos, siempre y cuando dé garantías democráticas.

– ¿En caso de que usted sea presidente con quién va a gobernar?

– En apicultura, cuando tienes un panal con miel se pegan todas las abejas. Cuando yo demuestre que soy el caballo ganador se van a colgar mucho, pero me he dado cuenta desde que soy independiente es que Chile está lleno de profesionales que están muy preparados, que sirven para ser ministros de Hacienda, de Economía.

– Al gobierno de Piñera le complicó en un principio tener un gabinete muy técnico ¿A quién de Chile Vamos incluiría en un gabinete para el componente político?

– No doy nombres porque no involucro a nadie, pero está lleno de gente buena. Hay diputados como Fuenzalida, Leopoldo Pérez, Andrés Allamand. En la UDI está Jaime Bellolio. Pero me he dado cuenta que hay gente común y corriente que además sabe de política.

– Usted ha criticado las figuras de Lagos y Piñera, pero ahora está muy bien posicionado Alejandro Guillier ¿Qué puede decir de él?

– Me parece una muy buena persona, tengo la mejor impresión de él. No está ligado al poder económico y tiene libertad absoluta para tomar decisiones.

– ¿Preferiría competir con él en una presidencial que con Lagos?

– He sido seis veces candidato, nunca me he preocupado de quien tenga al frente. Mientras más difícil es más fuerte el desafío así que voy a competir contra el que esté.

– ¿Cómo van los ejes de su propuesta de programa de gobierno?

– Tenemos un grupo de profesores universitario jóvenes, el grupo ‘Con calle’, de profesionales jóvenes. Los programas de gobierno se hacen cuando uno es candidato oficial. En lo que estamos trabajando hoy lo hemos hecho sobre la base de la realidad y la verdad. Uno de los cambios que hay que hacer es decirle a la gente la firme. Hoy lo más popular es decir no más AFP, pero nos dimos cuenta que el daño de eliminarlas es mucho más grande para la gente que modificarla, tenemos que llegar a un sistema mucho más mixto.

– Algunos lo han calificado a usted de populista, de basar su candidatura en la crítica y no bajo propuestas.

– He hecho un montón de propuestas. ¿Te has fijado que cuando dices algo que le duele a los poderes fácticos te tratan de populista? Porque para ellos ojalá no cambiara nada. Por ejemplo, he hablado del tema de Bolivia, dije que si era presidente tendríamos una política de integración como hace Europa, que no estoy dispuesto a darle ni un litro de agua ni un terreno de soberanía a ellos. Dije que no se podían eliminar las AFP y que hay que tener un sistema mixto y estamos haciendo una propuesta. Estamos estudiando con un equipo sobre la matriz productiva de Chile, que se está yendo al hoyo porque todo se basa en el cobre. Esto creo que lo planteó Alessandri y creo que Salvador Allende, estamos estudiando con unos ingenieros la posibilidad de evaluar la famosa carretera hídrica, que significa regar en 20 años 1 millón de hectáreas, de las cuales son 70 mil en la región. Fui el senador que más proyectos presentó el año pasado, además de montones de modificaciones constitucionales, como la autonomía del Servicio de Impuestos Internos o la posibilidad de renuncia para los parlamentarios.

– Usted plantea que la política está capturada por las empresas, pero esto no sólo ocurre en cuanto a financiamiento de campañas, sino que algunas autoridades tienen relación muy cercana con la producción de algunas empresas ¿Apuesta por cambiar eso?

– Yo he visto en el Senado que muchas veces los senadores se inhabilitan si tienen alguna relación. Lo que me preocupa es esta relación perversa entre la política y el dinero en la cual, por dar un ejemplo, algunas personas ligadas a la política recibían dinero fuera de campaña. No sólo hablo de financiamientos irregulares de campañas. Por ejemplo, Iván Fuentes, que fue defendido porque es una persona modesta, pero su pecado más grave no era la plata que le dieron para la campaña, sino la que le daban para vivir sus enemigos, las grandes empresas pesqueras. Aquí hemos visto como empresas reguladas por el Estado como Aguas Andinas o SQM repartían plata a destajo a los políticos. En Brasil mucha gente estaría presa.

– ¿Qué cambiaría usted a nivel de estructura más allá de autoridades?

– Que el presidente ni las autoridades no tengan nada que ver con los poderes fácticos. Mira lo que ha pasado con las últimas autoridades, están todos en los grandes niveles.

– ¿Usted tiene alguna relación importante con algún gran empresario del país?

– No, no tengo ninguna dependencia de nadie, gracias a Dios.

– Pero una relación cercana…

– No, conozco mucha gente, pero eso no quiere decir que yo… Conozco gente chica, mediana, grande, pero no me han dado ningún centavo y es cosa que vean los gastos reservados que recibí. El tema es qué libertad tengo yo como autoridad para producir un cambio en esto, que no existan temas vetados, así de claro.