Articulado pasará ahora a la Comisión de Constitución de la Cámara Alta, etapa que resultará fundamental ante la manifestación explícita de la oposición de recurrir al TC por vulneración de lo expresado en la Carta Fundamental.
Articulado pasará ahora a la Comisión de Constitución de la Cámara Alta, etapa que resultará fundamental ante la manifestación explícita de la oposición de recurrir al TC por vulneración de lo expresado en la Carta Fundamental.
Tania Merino Macchiavello
tania.merino@diarioconcepcion.cl
Posiblemente, la decisión de la presidenta de la DC, Carolina Goic, era la que generaba mayor suspenso dentro de la votación para la despenalización del aborto, debido a las diferencias partidarias surgidas a raíz del tema.
Sin embargo, la senadora terminó ayer por dar un voto de aprobación a la idea de legislar argumentando que en ningún caso de impone la obligación de abortar y que, por lo tanto, "éste no es un proyecto que plantea el aborto, de hecho, el delito sigue existiendo… plantea situaciones excepcionales".
La legisladora destacó además las modificaciones trazadas al articulado original a partir de la propuesta DC que, entre otras cosas, introdujo un proceso de acompañamiento a la mujer con embarazo en conflicto.
Así fueron tres votos a favor, los de Goic, Fulvio Rossi y Guido Girardi, y dos en contra, los de Francisco Chahuán y Jacqueline van Rysselberghe, los que decidieron el paso del proyecto a la comisión de Constitución que es donde comenzará próxima etapa de la discusión.
Una que será fundamental, considerando que la oposición manifestó ayer formalmente su idea de acudir al Tribunal Constitucional.
Chahuán detalló que el proyecto contiene visos de inconstitucionalidad porque atenta contra el articulado 19 número 1 de la Constitución y del pacto de San José de Costa Rica, también en contra al derecho de igualdad ante la ley por permitir atentar contra la vida de un ser humano por elementos que no tienen relación directa con él".
La senadora Jacqueline van Rysselberghe hizo reserva de constitucional en cuanto a los artículos 1 y 2 argumentando que "no es una ley que protege la vida del que está por nacer (…) También transgreden el derecho a la igualdad ante la ley", coincidió con Chahuán.
Respecto de la constitucionalidad, desde la vereda de la aprobación, Fulvio Rossi enfatizó que la interrupción del embarazo en ciertos casos no afecta los tratados internacionales pro vida firmados por Chile. "Lo central radica en ser capaces de entender que más allá de que la mortalidad por aborto es baja, esto se trata de un tema de derechos. Voto a favor", aclaró.
Girardi, en tanto, afirma que no sólo el proyecto no es inconstitucional sino que su parecer, lo que debe hacerse es aprobar también la Reforma Constitucional que habla de los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres. "Nosotros somos los que estamos contra los abortos, no los queremos. Quienes los favorecen son los sectores conservadores porque se oponen a este proyecto", enfatizó recordando que otra arista está en el respeto a los derechos humanos.
Críticas por debate cerrado
Pese a la crítica planteada en cuanto a la sesión cerrada de ayer a la sociedad civil, la presidenta de la comisión, Carolina Goic, anunció que "vamos a votar las ideas matrices porque ya hemos escuchado múltiples enfoques. Ya estamos en condiciones de decidir. Luego de ello, la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento deberá recibir el texto. La idea es que la Sala se pronuncie después".
A lo largo de la discusión el lunes 5, con la desde abril a la fecha, la Comisión recibió a juristas, médicos, profesionales del área de la salud, académicos, representantes de las iglesias y la sociedad civil, como así también diversos testimonios de mujeres que optaron o rechazaron un aborto.
"Lo que hemos hecho acá es hacer una discusión transparente porque hemos transmitido las sesiones", dijo, aludiendo a la transmisión televisiva del trabajo legislativo.