Después de las municipales, la Democracia Cristiana se enfocará en un debate que tendrá sus primeras definiciones en enero de 2017, correspondiente al destino de lo que actualmente se conoce como Nueva Mayoría.
Después de las municipales, la Democracia Cristiana se enfocará en un debate que tendrá sus primeras definiciones en enero de 2017, correspondiente al destino de lo que actualmente se conoce como Nueva Mayoría.
Maximiliano Alarcón González
maximiliano.alarcon@diarioconcepcion.cl
En algunos momentos, la Democracia Cristiana aparece como uno de los partidos más incómodos ante la configuración actual de la Nueva Mayoría. Su contraparte vendría siendo el Partido Comunista, que suele expresar un malestar similar en ocasiones por las diferencias ideológicas que se dan al interior de la coalición.
Por lo mismo, en medio de un escenario difícil por la mala evaluación del Gobierno y el bloque de centro izquierda en general, la DC busca proyección y esta vez evitando cometer, lo que consideran ellos, errores que se dieron al momento de conformar el actual conglomerado oficialista.
Para su Junta de enero, según señalaron varios ex líderes de la DC a El Mercurio, se deberían definir ciertos lineamientos para ver el futuro del partido en medio del conglomerado. La semana pasada, la senadora Carolina Goic, presidenta también de la colectividad, adelantaba que tras las municipales comenzarán a revisar el tema.
En aquella oportunidad manifestó: "Es muy importante ser capaces de trabajar de manera unitaria en el tema municipal, vamos con candidatos únicos a alcalde por lo que es momento de sumar fuerzas y no de dispersarnos. Posteriormente, sin duda hay una discusión que dar, pero para eso se requiere tarea municipal, asumir que si queremos generar ciertas propuestas país tenemos que tener mayorías después. Pero como DC no vamos a dar esta discusión hoy, sino que después de la municipal".
Programa incómodo
Lo que se trataría en específico sería la política de alianzas y el programa de gobierno. Frente a esto, ya algunos están postulando sus reflexiones respecto de lo que debería hacer la DC.
Uno de ellos es el presidente regional de la colectividad, el diputado Jorge Sabag: "el partido no quiere volver a cometer el error que cometimos en la elección pasada, donde tuvimos un programa de gobierno que no tuvo una discusión muy profunda. Por eso estamos como estamos, con un 15% de apoyo al Gobierno, lo que demuestra que las reformas no se han llevado bien, no le podemos echar la culpa a otras cosas. Por eso el partido quiere hacer un programa de gobierno propio con tal de hacer una propuesta país y luego ver quién va a liderar eso", indicó.
Además, respecto de las diferencias con el Partido Comunista, Sabag señaló: "La estrategia de la DC es no vetar a nadie y ponernos de acuerdo en las ideas. Por eso vamos a señalar, por ejemplo, que nosotros respetamos el sistema democrático como el único para sacar adelante los gobiernos, tanto en Chile como en Venezuela, Cuba, Norcorea o Brasil. Evidentemente, si el Partido Comunista apoya a un gobernante como el de Norcorea que asesina a un ministro de Educación, si el PC apoya un régimen como el de Venezuela, será incompatible seguir con ellos, pero si ellos se adhieren a un programa democrático que respeta los derechos humanos, vamos a poder seguir adelante".
La respuesta de otros partidos
Las palabras de Sabag no cayeron bien en el Partido Comunista, quienes también ven la opción de proyectar el conglomerado. El secretario regional del PC, Iván Quintana, respondió: "¿Eso qué tiene que ver con un programa? Esa es una opinión respecto de temas internacionales, si está o no dentro de un programa de la Nueva Mayoría habrá que verlo, pero si se parte del hecho de plantear problemas en los que tenemos diferencias, esa no es la manera de caminar".
Quintana aseguró que hay posibilidades de persistir como coalición, reconoce también que en la DC hay diferencias de opiniones las que estima deberían resolver.
Desde el Partido Socialista, su presidente regional, Juan Matamala, manifestó que "la Nueva Mayoría surge con la intención de agrupar a todas las fuerzas que tenían, aparentemente, un objetivo común a través de un programa de impulsar varias reformas en el país. ¿De qué depende la proyección? De que se pueda volver a generar ese consenso respecto de lo que se quiere hacer en Chile, si no estamos de acuerdo pierde viabilidad la Nueva Mayoría".