El general director de Carabineros, Mario Rozas, ordenó, la tarde de este martes, limitar el uso de escopetas antidisturbios solo a casos de inminente peligro de muerte. Esto, tras los cuestionamientos por las masivas lesiones oculares y la composición de la munición.

“Como una conducta de prudencia, se ha ordenado suspender el uso de esta munición no letal como herramienta antidisturbios. En consecuencia solo podrá ser utilizada, al igual que las armas de fuego, como una medida extrema y exclusivamente para la legítima defensa cuando haya un peligro inminente de muerte“, dijo Rozas a los medios.

Un estudio de la Universidad de Chile advertía que los balines policiales solo contienen un 20% de goma, lo que supondría un peligro mayor al estimado, para las personas que resultan heridas.

Al respecto, el general Rozas indicó que un análisis realizado por el Laboratorio de Criminalística de Carabineros (Labocar) discrepa de dicho estudio académico y también de la ficha técnica entregada por el proveedor de la munición.

La restricción será evaluada una vez que tengan en su poder los resultados de estudios complementarios solicitados a laboratorios externos, de Chile y el extranjero, agregó la autoridad policial.