"No existe obligación de reportar los efectos negativos para la salud o muertes posiblemente asociadas al uso de gases lacrimógenos", informó el especialista.
El bioquímico, biólogo molecular y comunicador, Gabriel León, explicó a través de su cuenta de Twitter sobre cómo funcionan y los efectos de las bombas lacrimógenas utilizadas en el país por las Fuerzas Especiales, principalmente para dispersar manifestaciones, en las personas.
En la publicación, el especialista indicó que “hasta donde pude averiguar, acá se usa el “gas CS“, cuyo componente irritante es el clorobenzilideno malononitrilo que, a temperatura ambiente, es sólido”.
Me han preguntado mucho por las “bombas lacrimógenas” que usan las FFEE. Hasta dónde pude averiguar, acá se usa el “gas CS”, cuyo componente irritante es el clorobenzilideno malononitrilo que, a temperatura ambiente, es sólido pic.twitter.com/72gSBh3yXA
— Gabriel León (@GaboTuitero) 24 de octubre de 2019
“Como de trata de un polvo seco y no de un gas, se requiere algún mecanismo de dispersión. Eso quiere decir que luego de un rato el polvo irritante decanta y queda activo por al menos cinco días. Cualquier mecanismo de dispersión (tráfico o intentar barrerlo) lo volverá a levantar”, detalló el especialista.
León también advirtió que “no existe evidencia que muestre posibles efectos cancerígenos en modelos animales, pero sí podría resultar muy peligroso para personas asmáticas o con enfermedades pulmonares“. “Sin embargo, la forma en que se usa en Chile –muchas veces disparando directamente al cuerpo de las personas, como hemos visto en estos días– es extremadamente peligrosa, lo mismo que usarlas en espacios cerrados”, añadió el autor de “La ciencia pop”.
No existe evidencia que muestre posibles efectos cancerígenos en modelos animales, pero sí podría resultar muy peligroso para personas asmáticas o con enfermedades pulmonares
— Gabriel León (@GaboTuitero) 24 de octubre de 2019
“Una cosa curiosa es que la convención de armas químicas prohíbe el uso de gas lacrimógeno en la guerra; sin embargo, su uso para dispersar protestas es muy frecuente en algunos países. Esto ocurre porque se le considera una opción no letal para dispersar protestas violentas”, aseveró el científico. Además, explicó que “como no existe obligación de reportar los efectos negativos para la salud o muertes posiblemente asociadas al uso de gases lacrimógenos, no existen datos de buena calidad con respecto a sus efectos en la población en escenarios reales de uso“.
El bioquímico y biólogo molecular aseguró que “la recomendación de uso que se hace a nivel internacional es muy restrictiva: solo para protestas violentas. La dispersión de protestas pacíficas en áreas residenciales usando gases lacrimógenos está muy cuestionada a nivel internacional”.
Como no existe obligación de reportar los efectos negativos para la salud o muertes posiblemente asociadas al uso de gases lacrimógenos, no existen datos de buena calidad con respecto a sus efectos en la población en escenarios reales de uso
— Gabriel León (@GaboTuitero) 24 de octubre de 2019
Ante la publicación del científico Gabriel León, un usuario preguntó: “Para los casos donde han lanzado lacrimógenas dentro de casas o departamentos, ¿qué pueden hacer esas personas para eliminar el polvo?.
Ante esta inquietud, el especialista respondió: “Aspiradora con filtro descartable o de esas que filtran usando agua. Si no tienen una a mano, usar paños húmedos y enjuagarlos en un balde con agua que pueden tirar por el WC. Usar ropa que cubra el cuerpo, guantes y protegerse los ojos. Ventilar”.
Aspiradora con filtro descartable o de esas que filtran usando agua. Si no tienen una a mano, usar paños húmedos y enjuagarlos en un balde con agua que pueden tirar por el WC. Usar ropa que cubra el cuerpo, guantes y protegerse los ojos. Ventilar.
— Gabriel León (@GaboTuitero) 24 de octubre de 2019