Una circular de la Superintendencia de Salud busca poner fin a los casos de discriminación que estaban protagonizando las isapres hacia personas transgénero, al momento de intentar afiliarse. La multa podría llegar a los 50 millones de pesos.
Este documento, emanado el pasado 4 de octubre, instruye a las aseguradoras que no deben siquiera consultar la identidad de género de las personas con las que firmará un contrato de salud.
“Atendido que la identidad de género no es una enfermedad, una patología ni una condición de salud, no debe declararse en el formulario de Declaración de Salud, ni tampoco la isapre puede exigirla (…) La isapre se encuentra impedida de rechazar la afiliación, restringir la cobertura o dar término al contrato de salud basándose en dicho antecedente”, señala la circular número 336.
De acuerdo a la Superintendencia, a la fecha se registraban al menos siete casos de discriminación: cinco en isapre Colmena, uno en isapre Cruz Blanca y uno en Vida Tres.
Sin embargo, el episodio más conocido fue el de Benjamín, de 24 años, quien denunció a Colmena de negar la filiación debido a su transexualidad. Incluso, para ello, le exigieron “comprobar” su identidad de género, a lo que el joven respondió con certificado psicológico.
“Sobre la base de ese papel decidieron rechazarme, porque era un riesgo económico para ellos. Me mandaron una carta de restricción por 36 meses, en la que decían que solo cubrirían el 25% de todas las prestaciones durante tres años”, relató el joven.
Tras ello, Benjamín llevó el caso a la justicia y la Corte de Apelaciones de Santiago, en agosto pasado, terminó por ordenar que la isapre debía afiliarlo y además, retirar la transexualidad de su lista de patologías, informó el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh).