Tras los cuestionamientos por el actuar de carabineros y las mentiras que salieron a la luz del procedimiento policial en el que fue asesinado el comunero mapuche Camilo Catrillanca, el director general de Carabineros Hermes Soto presentó su renuncia.
El último antecedente que golpeó al uniformados y puso en duda su autoridad al mando de la institución fue la filtración de nuevos videos del operativo en la comunidad de Temucuicui, en Ercilla, imágenes que evidencia la inexistencia de un enfrentamiento entre los funcionarios del Gope y el comunero y su acompañante, un menor de edad.
Al conocer ese nuevo antecedente, Soto declaró no estar al tanto de la existencia de dichos registros, generando críticas en la oposición.
Respecto a su reemplazante, se presume sea Álvaro Altamirano, quien participó durante la mañana del Comité de Seguridad, llevado a cabo en La Moneda.