La mañana de este miércoles, Juan Carlos Cruz, José Andrés Murillo y James Hamilton protagonizaron un punto de prensa Roma, Italia, donde revelaron parte de lo que conversaron con el papa Francisco en el Vaticano.

La cita comenzó con la lectura de un comunicado por parte de Hamilton donde señaló que “en estos días conocimos un rostro amigable de la Iglesia, totalmente distinto al que conocimos antes”. Bajo este marco, es que el pontífice “nos pidió formalmente perdón a nombre propio y a nombre de la Iglesia universal. Reconocemos y agradecemos este gesto y la enorme hospitalidad y generosidad de estos días”, precisó Hamilton.

“Pudimos conversar de manera respetuosa y franca con el Papa. Abordamos temas difíciles como el abuso sexual, el abuso de poder y sobretodo el encubrimiento de los obispos chilenos. Realidades a las que no nos referimos como pecados, sino como crímenes y corrupción, y que no se agotan en Chile, sino que son una epidemia, una epidemia que ha destruido miles de vidas de niños, niñas y jóvenes, personas que confiaron y que fueron traicionadas en su fe y en su confianza”, agregaron.

Asimismo, los tres, a petición de Francisco, entregaron su opinión respecto al grave problema de abuso sexual dentro de la institución eclesiástica. “Le expresamos la gravedad del encubrimiento del abuso porque lo sostiene, lo replica, lo hace impune y favorece la creación de redes de abuso dentro y fuera de la Iglesia”, señalaron.

“Conversamos acerca del ejercicio patológico e ilimitado del poder que es piedra angular del abuso sexual y del encubrimiento. Le expresamos que la Iglesia tiene el deber de transformarse en aliada y guía en el mundo respecto de la lucha contra el abuso y de ser refugio para las víctimas, cosa que hoy no ocurre”, precisaron.

La invitación se enmarca en las acusaciones que existen sobre el actual obispo de la diócesis de Osorno Juan Barros, respecto a su participación como encubridor de los abusos sexuales que cometió Fernando Karadima. El caso requirió un informe realizado por Charles Scicluna, líder del equipo doctrinal encargado de las denuncias presentadas contra religiosos acusados de abuso.

Cabe señalar que el pontífice recibió a cada invitado por separado, para este martes sostener una reunión de carácter privado con los tres. Los encuentros comenzaron el pasado 27 de abril y que culminaron ayer en el Vaticano.