Sebastián Piñera volvió a referirse a la polémica Operación Huracán, donde no se encontró pruebas contra los ocho imputados. En ese sentido, calificó la situación como “extremadamente grave” y afirmó en La Tercera que durante su gobierno, va a “tomar medidas muy profundas”.

“Estas dos instituciones, que son fundamentales para la lucha contra la delincuencia y el terrorismo, y para proteger la seguridad de los ciudadanos, se han acusado mutuamente de cometer graves delitos e irregularidades”, declaró el futuro mandatario, quien agregó que la realidad actual “debilita la capacidad del Estado” para combatir, por ejemplo, al narcotráfico y al crimen organizado.

En relación a lo anterior, comunicó que pretende mejorar la “coordinación entre policías, fiscales y jueces” con el fin de “generar una profunda modernización administrativa y operativa de Carabineros y de la Policía de Investigaciones (PDI)”. Se comprometió, además, a reformular el sistema nacional de inteligencia y a modernizar la Ley Antiterrorista.

Para esta última, Piñera buscará la incorporación de agentes encubiertos en las investigaciones. Se trata de una medida que no logró establecer durante su primera administración, a pesar de que sí logró promover cambios. También procurará por añadir las entregas vigiladas, los testigos protegidos y la figura del informante, el cual estará presente en delitos de persecución de drogas, pero no en casos de terrorismo.

Su programa de gobierno, informó La Tercera, agenda una auditoría externa contable para las policías. Ello se podría considerar como una respuesta al fraude millonario que protagonizó Carabineros.