“Esta fiscalía ha decidido cerrar y no perseverar en este procedimiento, por cuanto durante la investigación realizada no se han reunido antecedentes suficientes para fundar acusación”, detalla el escrito presentado por el fiscal Víctor Vidal que puso fin a cinco años de diligencias y cerró sin responsables el caso de Benjamín Ogas Ogas, joven de 23 años asesinado la mañana del 18 de diciembre de 2011 con una puñalada en el tórax a pasos del acceso al Metro Unión Latinoamericana.
Estudios internacionales detallan que Chile es el segundo país de América con la menor tasa de homicidios del continente americano, siendo superado solo por Canadá. Sin embargo, los expertos observan con atención el incremento sostenido que se registra en este tipo de delitos en la última década y en especial una cifra que resulta preocupante: el 20% de los casos son archivados por la fiscalía, o bien se les aplica una decisión de no perseverar, poniendo fin a las investigaciones sin que exista una condena.
La Tercera, vía Ley de Transparencia, accedió al detalle de cómo la fiscalía puso término a los 18.146 casos tipificados como homicidio a nivel nacional entre 2010 y el primer semestre de 2017. ¿El resultado? Solo la mitad de los casos llegó a una condena, mientras que el 9% terminó en absolución (ver infografía). Para realizar este análisis se excluyeron los cuasidelitos de homicidio. La información de fiscalía no específica casos de homicidio frustrado.
Una de las principales preocupaciones que existe en la Fiscalía Nacional es la baja sostenida que han registrado las condenas en los últimos años (ver entrevista página 4). Si en 2012 hubo 1.301 condenas (56% del total de causas de ese año), al año siguiente estas llegaron a 1.219 (53,4%). En tanto, en 2014 hubo 1.237 condenados (49,9%), mientras que en 2015 la cifra llegó a 1.119 sentenciados (47,8% de las investigaciones concluidas ese año). En 2016 la Fiscalía Nacional se anotó el peor resultado: solo logró 1.111 condenas, lo que equivale al 46,5% de los casos. Las tasa de condenas cayó 10 puntos porcentuales respecto a 2012.
Otra de las preocupaciones de autoridades y expertos es el alza en el número de casos de homicidio. Según estadísticas de la Unidad Especializada en Responsabilidad Penal Adolescente y Delitos Violentos de la Fiscalía Nacional, en 2012 ingresaron 1.320 casos para ser investigados por el Ministerio Público. Un año después, en 2013, la cifra llegó a 1.468. Pero en 2014 el número de causas llegó a su mayor nivel: 1.782 homicidios indagados por la fiscalía. En 2015 hubo 1.631 ingresos y en 2016 alcanzaron los 1.641.
No obstante, antecedentes aportados por la Fiscalía Nacional detallan que la participación de menores vinculados a este tipo de delitos ha mostrado una baja importante. Si en 2012 hubo 173 adolescentes implicados en estos hechos, en 2016 la cifra bajó a 101; es decir, una disminución del 41,6%.
De los casos analizados, 9.905 (54,5%) ocurrieron en regiones y 8.241 (45.5%) en Santiago. Pero un análisis en detalle reveló las tres zonas con mayor cantidad de cierre de casos sin pasar por un juicio. Así, Tarapacá (28,9%), Antofagasta (28,5%), La Araucanía (28%) y Valparaíso (22,1%) tienen los mayores porcentajes de archivo y decisión de no perseverar en casos de homicidio.
En un escenario opuesto están las regiones con mayores niveles de condenas. La Región de Magallanes encabeza el listado, ya que entre 2010 y el primer semestre de 2017 la fiscalía llevó a juicio y condenó al 79% de los acusados de homicidio (111 casos), porcentaje muy superior al promedio nacional de condenas (51,9%). En Los Lagos, en igual período, se condenó al 69,8% (433 casos) y en Aysén al 69,3% (104 casos).
Solo la Región Metropolitana concentra el 45.5% de los homicidios a nivel nacional (8.241 casos). Además de ser la zona del país con mayor cantidad de habitantes, también posee los mejores equipos especializados de fiscales, Carabineros y la PDI para resolver este tipo de delitos.
Sin embargo, uno de los peores resultados en materia de términos de casos de homicidios se registra en las fiscalías Centro Norte, encabezada por el fiscal Andrés Montes, y el área Occidente, que durante gran parte del período analizado estuvo a cargo de la ex fiscal Solange Huerta (2008-2016), actual directora del Sename.
Ambas zonas, además de estar por sobre el promedio nacional de casos archivados o donde se aplicó decisión de no perseverar, están por debajo del promedio nacional en el logro de condenas.
En el caso de la Fiscalía Centro Norte, entre 2010 y el primer semestre de 2017 logró condenar solo al 42,3% de los acusados (1.210 casos), mientras que la zona Occidente obtuvo un porcentaje de condenas del 44,4% (696 casos). La Fiscalía Sur, que lidera el abogado Raúl Guzmán, en tanto, consiguió que el 54,2% de los acusados fueran condenados (1.475), mientras que la Fiscalía Oriente, al mando del fiscal Manuel Guerra, registró un 50,9% de condenas (577).
La Tercera