“Sentí un ruido que explotaba y que se mantuvo largo rato. No creo que sea una bomba, tiene que ser un trueno”. Así eran algunas de las reacciones de los habitantes de varias comunas de La Araucanía, que hoy despertaron con un inusual estruendo, que -dicen- duró cerca de un minuto y se sintió en Temuco, Lautaro, Angol, Gorbea y Pitrufquén.
El fenómeno ocurrió cerca de las 8.30. Rápidamente, los usuarios de las redes sociales comenzaron a asociarlo con ejercicios militares, el sobrevuelo de aviones supersónicos, aumento en la actividad volcánica y tormentas eléctricas, entre otros. Sin embargo, hasta hoy, aún se desconocía su origen. “No tenemos hasta el minuto la causa de lo que generó este ruido. Lo que sí sabemos es que no existe afectación de personas ni viviendas”, explicó Juan Cayupi, director regional (S) de Onemi.
La primera teoría que surgió era que se trataba de un trueno. Sin embargo, desde la Dirección Meteorológica descartaron que hubiera actividad eléctrica en la región y explicaron que estos abarcan áreas más acotadas.
Los expertos también manejan otras teorías. Rodrigo Demarco, astrónomo del Departamento de Astronomía de la U. de Concepción, explicó que este fenómeno es conocido como sonic boom o estallido de sonido. Ocurre cuando un cuerpo se mueve dentro de la atmósfera a una velocidad superior a la del sonido (1.223 km/h), generando “una onda de alta presión”.
Este “estallido” es frecuente escucharlo en aviación, especialmente durante ejercicios militares. “Una de las explicaciones es que pudo haber sido un avión de combate. Esto pasa cuando las naves avanzan desde una velocidad inferior a la del sonido a una superior, o viceversa”, explicó Demarco.
Otra posibilidad, añadió, es que un bólido haya ingresado a la atmósfera. “Estas son rocas que están dando vueltas por el espacio e ingresan a la atmósfera terrestre. Dependiendo del ángulo de entrada, la masa y otros factores, puede ingresar a una velocidad superior a la del sonido y provocar este mismo sonic boom”.
La geóloga y vicepresidenta de la Sociedad Geológica de Chile, Millarca Valenzuela, explicó que se necesita más evidencia para determinar el origen. “Si tuviéramos una red de detección de meteoros a nivel país probablemente hoy tendríamos la certeza de si el evento tuvo relación con la caída de un objeto extraterrestre”.