Alejandro Tudela Román
Presidente
Puertos de Talcahuano
En su visita a la Región del Biobío, el Presidente de la República confirmó que el Plan de Fortalecimiento Industrial es prioritario en su último año de gestión, estando en el rango de política de Estado, lo que derivaría en que su continuidad no debiera ser cuestionada tras el cambio de mando de 2026. No obstante lo anterior, es sabido que los planes y programas son sometidos a evaluación de continuidad, implicando que la proyección de la iniciativa dependerá de su avance efectivo en los próximos 14 meses.
Es importante relevar que hace tiempo no se veía un conjunto de iniciativas de recuperación económica regional que generara un consenso tan amplio, a nivel político, gremial, sindical y académico; resultando, por tanto, clave apoyarlo y promoverlo. En ese logro, hay que destacar la voluntad y dedicación del Ministro de Economía, Fomento y Turismo, Nicolás Grau Veloso, quien prestó atención, visitó y se impregnó del difícil momento que enfrenta la Región del Biobío a raíz de la crisis de Huachipato.
El plan propuesto contempla 32 medidas concretas, todas alineadas con la Estrategia Regional de Desarrollo 2015-2030, el que parte de la premisa que Biobío es una puerta de entrada y salida para sus sectores productivos, como también para la macrozona sur de Chile y Argentina.
En concordancia con las medidas identificadas, es necesario que el Plan Regulador Metropolitano de Concepción (PRMC) se haga eco de esa vocación de plataforma internacional para el intercambio de bienes y servicios. Se requiere un PRMC que, respetando la biodiversidad y la calidad de vida, no afecte la competitividad de la cadena logístico-portuaria asociada.
Es de relevancia que los instrumentos de desarrollo intercomunal y regional dialoguen, considerando que tenemos una conectividad terrestre del Biobío “al debe”, tanto en el transporte de carga como en el de pasajeros; como también que los tiempos de ejecución de los proyectos aprobados se aceleren, priorizando las inversiones con una visión sistémica. En efecto, el Puente Industrial, el acceso norte ferroviario, el nuevo Puente Ferroviario, la ruta Pie de Monte, la conexión de la ruta Interportuaria con el puerto de San Vicente y la nueva licitación de ese terminal, son proyectos cruciales por sí mismos, resultando más trascendentales cuando los vemos como parte de una red; una red clave en el mapa del comercio mundial.