Vulnerabilidad de los adultos mayores
14 de Enero 2025 | Publicado por: Diario Concepción
Es urgente que asumamos esta tarea como un compromiso colectivo.
Dra. Carola Salazar Norambuena
Directora Departamento Ciencias Sociales UCSC
Recientemente, se viralizaron imágenes de un indignante asalto en Coronel, Región del Biobío, donde una mujer forcejeó con un adulto mayor en la entrada de su hogar para robarle 14 mil pesos de su pensión. A pesar de los esfuerzos por defenderse, este hecho evidenció la preocupante vulnerabilidad que enfrentan los adultos mayores en nuestro país.
La vejez suele reflejar las condiciones acumuladas durante toda la vida de una persona. Si alguien creció en un entorno con limitaciones en educación, salud o empleo, es probable que esas carencias se manifiesten con mayor intensidad en la tercera edad. A esto se suma que muchas personas mayores viven en sectores con altos índices de inseguridad, donde el acceso a servicios de protección es reducido, lo que aumenta su exposición a riesgos.
Para contrarrestar esta situación, es fundamental fortalecer las redes comunitarias. Conocer a los vecinos y fomentar la empatía a través de la interacción diaria son acciones simples pero efectivas que pueden mejorar la seguridad de los adultos mayores. Además, el acceso a tecnología, como teléfonos móviles o dispositivos de emergencia, les permite mantenerse conectados y solicitar ayuda en situaciones críticas. Estas iniciativas deben ser complementadas con el compromiso de las familias para garantizar un entorno seguro y acogedor.
El respeto hacia los adultos mayores y la promoción de la comunicación intergeneracional son igualmente esenciales. En nuestra sociedad, las generaciones suelen vivir separadas, lo que limita los vínculos entre jóvenes y personas mayores. Crear espacios de encuentro es una forma efectiva de construir puentes, promoviendo el entendimiento mutuo y el aprendizaje recíproco.
Es urgente que asumamos esta tarea como un compromiso colectivo. No podemos depender únicamente de políticas públicas para construir una sociedad inclusiva. Generar espacios de convivencia y trabajo conjunto es una responsabilidad compartida que podemos abordar desde ahora, fomentando una conexión genuina entre generaciones y garantizando un entorno más solidario para nuestros adultos mayores. El bienestar de ellos es, en última instancia, un reflejo de los valores y la empatía que cultivamos como sociedad.