Álvaro Peña Fritz
Académico PUCV-CPI

Los teleféricos se presentan como una opción ideal para las ciudades costeras del país, como Talcahuano, Valparaíso, Iquique y Coquimbo y podrían convertirse en una solución para las comunas que enfrentan desafíos de conectividad debido a su topografía y su desarrollo urbano denso en el plan de la ciudad.

La electromovilidad mediante teleféricos tiene un bajo impacto al medio ambiente y una alta eficiencia; no requiere una extensa infraestructura terrestre y se adapta perfectamente a terrenos irregulares y desniveles pronunciados.

La experiencia en América Latina muestra que la implementación de estos proyectos no solo mejora la movilidad urbana, sino que también impulsa el desarrollo económico al integrar sectores aislados con zonas clave como puertos, centros turísticos y áreas residenciales.

Por ejemplo, en el caso de Valparaíso, un proyecto estudiado en 2015 por la PUCV destacó su potencial para unir Placilla con el borde costero, promoviendo la integración de comunidades y generando sinergias con el sistema de transporte público existente.

Sería deseable que las iniciativas que hay en estudio en diversos puntos del país, finalmente se concreten y un buen modelo para implementarlos es a través del sistema de concesiones. Otro reto que enfrentan tiene que ver con la gran cantidad de permisos y autorizaciones en los procesos de evaluación, por lo que se hace necesario que las autoridades tengan una mirada amplia y prioricen inversiones como estas.

Existen razones poderosas para optar por los teleféricos: fomentan el desarrollo sostenible, integrando dimensiones ambientales, sociales y económicas. Su capacidad para salvar barreras naturales sin afectarlas y su atractivo turístico aportan un valor agregado a áreas costeras que buscan diversificar sus estrategias de desarrollo.

En esa línea, Talcahuano, Iquique y Coquimbo, tienen oportunidades significativas para aprovechar esta tecnología, especialmente en áreas donde el transporte público enfrenta limitaciones. Al adoptar soluciones innovadoras como estas, las ciudades chilenas pueden liderar en movilidad urbana sostenible y eficiente.