Llamado a la conciencia durante todo el año

Es importante conocer los factores de riesgo y los síntomas permite a las mujeres buscar atención médica a tiempo.

Paola López Freire
Enfermera-Académica Facultad de Medicina UCSC.

El cáncer de mama es una de las enfermedades más comunes entre las mujeres, pero muchas aún no cuentan con la suficiente información sobre su detección temprana. Aunque el 19 de octubre se conmemora el Día Mundial de la Lucha contra el Cáncer de Mama, este es un tema que debe abordarse durante todo el año, porque la conciencia sobre los síntomas y la prevención puede marcar la diferencia entre un diagnóstico temprano y un tratamiento complicado.

Las mujeres deben estar atentas a cambios significativos, como la aparición de masas en el seno o en la axila, alteraciones en el tamaño y forma del seno, cambios en la coloración de la piel que podrían parecerse a la piel de naranja o la presencia de secreciones a través del pezón.

La mayoría de las organizaciones de salud sugieren que las mujeres comiencen a realizarse mamografías a los 40 años. Sin embargo, aquellas con antecedentes familiares o factores de riesgo significativos deben considerar comenzar desde los 30 y recomiendan que se realicen con una frecuencia anual.

Es esencial diferenciar entre factores de riesgo modificables y no modificables en el cáncer de mama. Los factores no modificables son inevitables, como la edad avanzada, antecedentes familiares y mutaciones genéticas, son inevitables. Sin embargo, los factores modificables, como el consumo de alcohol y la obesidad son áreas donde podemos actuar para reducir el riesgo.

Las medidas de prevención para el cáncer de mama son fundamentales para cuidar nuestra salud. Mantener un peso adecuado, realizar actividad física regular y seguir una dieta equilibrada pueden tener incidencia en este diagnóstico, además de limitar el consumo de alcohol y no fumar.

Es necesario realizarse autoexámenes mensuales y acudir a revisiones médicas preventivas para la detección temprana, puede salvar vidas y aumentar significativamente las tasas de sobrevida. Por otro lado, es importante conocer los factores de riesgo y los síntomas permite a las mujeres buscar atención médica a tiempo lo que puede resultar en diagnósticos más tempranos y tratamientos menos invasivos.