Camila Contreras Pereira
Seremi de la Mujer y Equidad de Género en Biobío
Este 4 de septiembre se cumplen 72 años desde la primera vez que las mujeres votaron en una elección presidencial, un hito fruto del esfuerzo de aquellas precursoras que, desde sus pequeñas zonas de influencia, ganaron un debate dominado por el machismo, el paternalismo y los prejuicios de la época, debate que explicaba una supuesta inferioridad intelectual, desinterés e ignorancia, la cual nos inhabilitaba de decisiones tan trascendentales para nuestra sociedad. El sentido común triunfó y el derecho a voto marcó en buena parte el inicio de una lenta, ondulante pero constante inserción en política. Sin embargo, a dos meses de las próximas elecciones municipales, donde el voto será obligatorio, aún enfrentamos grandes desafíos. En la Región del Biobío, de 1748 candidaturas aceptadas por SERVEL, solo el 35% corresponde a mujeres, y de las 150 candidaturas a alcaldías, apenas 31 son femeninas.
Estas cifras reflejan una subrepresentación que no es casual, sino producto de estructuras socioculturales que asignan roles de género tradicionales y ponen en las mujeres una carga desproporcionada del trabajo de cuidados. Esta falta de corresponsabilidad en los cuidados domésticos y familiares limita el tiempo y los recursos que las mujeres pueden dedicar a sus carreras políticas, retrasando o impidiendo su participación en roles de liderazgo y toma de decisiones, sobre todo en aquellos cargos de mayor responsabilidad y poder.
La participación femenina en política es crucial para una democracia representativa e igualitaria, ya que aporta perspectivas valiosas para abordar los complejos desafíos que enfrentamos en el Chile actual. Para ello es fundamental seguir implementando políticas que promuevan la equidad de género en todos los ámbitos como lo es la participación política. Este desafío no solo es tarea del Estado, sino también de la sociedad civil organizada a través de sus organizaciones sociales y partidos políticos.
Desafío que quedó en evidencia, cuando vemos que en nuestra región tenemos 23 candidatos, de un total de 195 en el país, rechazados por el SERVEL ya que figuraban en el Registro nacional de deudores de pensión de alimentos, candidatos que sin la ley que permitió este registro, siguen sus trayectorias políticas a pesar de la violencia económica ejercida al rehuir de sus responsabilidades paternales. Con elecciones a la vuelta de la esquina, es imperativo reflexionar sobre las oportunidades y tareas que nos debemos como sociedad para el Chile de cuidados que nos proponemos.