Derechos Humanos de NNA migrantes

Verónica Gómez
Investigadora Estudio Niñez Migrante
Académica de la Facultad de Comunicación, Historia y Ciencias Sociales UCSC.

Ante el aumento de familias migrantes en Chile, es necesario conocer  la realidad de niños, niñas y adolescentes (NNA) migrantes en la Región del Biobío. Gracias al Estudio Niñez Migrante, se observó que gran parte de ellos no están matriculados en el sistema escolar, y que la falta de viviendas adecuadas y el acceso a la salud son problemas persistentes para esta población en situación de vulnerabilidad.

A pesar de que los  NNA  migrantes cuentan con un acceso garantizado legalmente e integración adecuada, sufren desafíos notables como el bullying y la baja participación de las familias en la vida escolar. Ellos representan el 5% de la matrícula escolar, destacando la necesidad de reforzar la inclusión y soporte educativo para esta población vulnerable y un 14.7% de estos niños está fuera del sistema educacional formal, especialmente en educación inicial.

Si bien el derecho a la salud es reconocido por la ley, la inscripción en centros de salud es baja y carecen de cualquier tipo de previsión. Los trámites de acceso son ágiles, pero existen obstáculos para obtener la residencia, afectando principalmente a los adolescentes que buscan servicios de salud sexual y reproductiva.

En el caso de la vivienda adecuada, esta no está garantizada por ley, presentando el desafío más crítico. Existen problemas de irregularidad en los arrendamientos, allegamiento, hacinamiento, altos costos y movilidad residencial frecuente con una oferta limitada de programas de apoyo a la vivienda. Se evidencia una preocupante cifra de hacinamiento, donde un 54% de los niños migrantes reside en condiciones de alta densidad, lo que nos impulsa a buscar soluciones habitacionales dignas y accesibles.

No hay que olvidar que los NNA son sujetos portadores de derecho independiente de donde vengan y donde estén.  Nuestro país está suscrito a tratados con convenciones internacionales y tiene una normativa que no restringe el acceso a derechos básicos como salud o educación a extranjeros.

Los NNA no solo tienen una condición muy precaria, sino que su situación de vulnerabilidad es aún mayor, por lo tanto, son sujetos de protección especial, no solo del Estado, sino de toda la sociedad y todos somos garantes de sus derechos. Es importante ayudarlos para interrumpir estas situaciones de vulneración y desprotección que tienen, por ello es necesario trabajar por su integración e inclusión real en la sociedad chilena, bienestar y calidad de vida.