La versatilidad en el Siglo XXI: un mundo de oportunidades

16 de Junio 2024 | Publicado por: Ricardo Cárcamo
Fotografía: Cedida

Entonces, vale la pena preguntarnos ¿cómo podemos, cada uno de nosotros, aprovechar al máximo nuestra versatilidad y contribuir de manera significativa?

Victoria Rodríguez Ruiz
Encargada de vinculación y Transferencia tecnológica en CePIA-UdeC

En el dinámico y cambiante mundo del siglo XXI la versatilidad profesional se ha convertido en una habilidad muy valiosa. Independientemente del campo de estudio, la capacidad de adaptarse y aplicar conocimientos en diversos contextos es crucial tanto para el éxito profesional como para la vida personal. Como ingeniera química de formación y actualmente encargada de vinculación y transferencia tecnológica en el Centro Para la Instrumentación Astronómica de la Universidad de Concepción, he tenido la oportunidad de experimentar y apreciar esta versatilidad de primera mano. Jamás pensé que mi carrera me podría llevar a trabajar en un laboratorio asociado principalmente con áreas como la astronomía y la electrónica, pero aquí estoy, disfrutando y aprendiendo día a día.


Tradicionalmente, las carreras solían verse como senderos fijos hacia profesiones específicas, sin embargo, la realidad nos muestra que los conocimientos y habilidades adquiridos pueden trascender límites, encontrando aplicaciones sorprendentes en diversos campos. La formación académica proporciona una base sólida, pero es nuestra capacidad de adaptación constante es lo que nos lleva al siguiente nivel.

CePIA se dedica al desarrollo tecnológico para la astronomía, un campo que a primera vista puede parecer especializado y distante de muchas otras industrias. Sin embargo, uno de los pilares fundamentales del centro es la transferencia tecnológica, lo que implica la capacidad de adaptar nuestros conocimientos y tecnologías para que puedan ser aplicados en una amplia variedad de contextos. ¿Suena familiar? En efecto, es la esencia de la versatilidad: transformar el conocimiento para generar un impacto que trascienda fronteras.


Entonces, vale la pena preguntarnos ¿cómo podemos, cada uno de nosotros, aprovechar al máximo nuestra versatilidad y contribuir de manera significativa? La clave podría radicar en nuestra disposición para aprender, adaptarnos y compartir nuestras habilidades, convirtiendo nuestra versatilidad en una fuerza transformadora para nuestro entorno y en nuestras vidas.