Mejores pensiones

El llamado, una vez más, es a los representantes que las personas han elegido a través de su voto para mejorar sus condiciones de vida, a abanderarse con los intereses de sus propios electores.

Daniela Dresdner Vicencio
Delegada Presidencial del Biobío

Mejores pensiones para Chile es uno de los ejes del programa de gobierno del Presidente Gabriel Boric pero, por sobre todo, es una de las demandas centrales y más sentidas por décadas entre la ciudadanía. Es por esto que necesitamos de manera urgente llegar a acuerdos y poner los intereses de chilenos y chilenas por encima de cualquier intención o idea de ventaja partidista.

Esta urgencia tiene que ver con la realidad que viven miles de nuestros vecinos y vecinas que reciben pensiones insuficientes y que ven en una reforma al sistema la única opción que sus jubilaciones puedan aumentar y por ende, mejorar en parte su condición de vida después de décadas de trabajo. Son estas personas que, sin medir ventajas políticas, hacen un llamado a sus representantes a sentarse a la mesa y acercar posiciones que vayan en directo beneficio de quienes se han empobrecido con el actual sistema de pensiones.

Para graficar esta situación, podemos constatar que el 50% de los pensionados por vejez recibe un monto autofinanciado menor a 124 mil pesos y tres de cada cuatro jubilados reciben una pensión inferior al salario mínimo. Desde el Gobierno ha existido disposición y flexibilidad para modificar las condiciones, porcentajes y destino de los fondos, que eran parte de las objeciones de quienes se oponían. También todas las indicaciones necesarias para contar con un proyecto de ley que logre poner por delante la mejora en un sistema que sabemos obsoleto. Un proyecto que tenga un carácter solidario, que garantice seguridad social e incluso que entregue la posibilidad a las personas de elegir la administración de parte de estos fondos en entidades privadas o estatal, lo que aumentará la competencia que no tiene otra finalidad que mejorar e incrementar los montos finales de las pensiones.

Además, los fondos y cotizaciones de las personas tendrán un carácter heredable, inexpropiable e inembargable como una forma de despejar las dudas sobre la propiedad de las pensiones. Sin espacio para especular.

El llamado, una vez más, es a los representantes que las personas han elegido a través de su voto para mejorar sus condiciones de vida, a abanderarse con los intereses de sus propios electores y no cerrar la puerta a una reforma estructural que vendrá a entregar mayor justicia y equidad a quienes han entregado parte de su vida para construir un Chile mejor.