Violencia en contexto escolar, todos presentes

18 de Agosto 2023 | Publicado por: Diario Concepción
Fotografía: Cedida

Raúl Perry
Fundación San Carlos de Maipo

En una nueva conmemoración del Día Escolar por la Paz y la No Violencia, si pudiéramos resumir en una frase la situación dentro de los establecimientos educacionales de nuestro país podríamos decir: antes de la pandemia no era buena y ahora está peor.

El 2019 se hablaba de que casi un 25% de los estudiantes (uno de cada cuatro) relataban haber sufrido algún tipo de agresión física o verbal. Un reporte de la Unesco publicado en 2021 estableció que 28% de los estudiantes declararon haber participado en peleas o haber sufrido agresiones físicas en el último año. La organización “Bullying sin fronteras” reportó entre 2020 y 2022 casi 6 mil casos graves de acoso escolar en Chile, situándonos, junto a Colombia y México, como uno de los tres países más afectados durante su retorno a clases, y declarando que nuestro país “ha subido un escalón” en el nivel de violencia en niños, niñas y adolescentes (NNA).

En entornos violentos es imposible aprender. El mismo documento de la UNESCO señala que quienes nunca o casi nunca habían sufrido acoso obtuvieron un desempeño casi un 10% más alto en comprensión lectora que quienes lo sufren semanalmente. El acoso también afecta los resultados de la prueba PISA en ciencias, y quienes lo sufren muestran más ansiedad a la hora de los exámenes.

Como país no estamos con los brazos cruzados ante esta realidad. El Ministerio de educación ya ha ampliado la cobertura del programa “A convivir se aprende”, y si bien las temáticas que aborda son importantes, pareciera que limitan la convivencia a una práctica que sólo existe dentro de la escuela, como si los niños fueran unos en el espacio escolar y otros completamente distintos en el hogar. Si no somos capaces de modelar cada uno de los entornos en donde se desarrollan nuestros NNA, difícilmente podrán tener pautas de convivencia apropiadas en cada uno de ellos. Abordar únicamente el espacio escolar es como tratar de correr una carrera con un solo pie: se puede avanzar, pero claramente más lento que si camináramos con los dos.

En Chile existen programas ya evaluados y certificados que abordan las temáticas de parentalidad y que podrían permitir que, a través de un nuevo diálogo entre padres y niños, se den patrones de convivencia no violentos que se extiendan a la escuela. La experiencia que tenemos como Fundación San Carlos de Maipo muestra que programas bien diseñados pueden impactar la manera en que se convive. La parentalidad no debe entenderse, por lo tanto, como una medida de largo plazo: cuando se convive a diario con los niños todo lo que se haga con ellos es inmediato, es del ahora.

En este nuevo día por la paz y la no violencia nuestra invitación al Ministerio de Educación es a entender que en las escuelas se forman personas, no estudiantes, y que por consiguiente no es un proceso que pueden hacer solos, es un proceso en donde padres, madres y cuidadores estamos deseoses de participar, porque amamos a nuestros NNAs. ¿Nos dejarán participar?