Mes de las personas mayores: resiliencia de por vida

Así como las personas mayores de 60 años esta vez vivieron una pandemia, también han vivido varios cambios que han acontecido no solamente en Chile, sino que mundialmente.

Dra. Carola Salazar Norambuena
Académica e Investigadora OES-UCSC

El primer día de octubre se celebra el Día Internacional de las Personas de Edad. Este año, en Nueva York, la temática se centró en la resiliencia de las personas mayores, considerando el contexto sociosanitario por la pandemia por el Sars-CoV-2.

No es necesario recordar todo el proceso de la pandemia en Chile desde el primer caso notificado en marzo del 2020, pero sí es reflexionar en cómo fue esta experiencia para el grupo etario de las personas de 60 años y más. Una de las primeras medidas que los afectaba directamente surgió el 14 de marzo de ese año, cuando Chile oficialmente pasaba a fase 3 de contagio: los casos diagnosticados de Covid-19 ya no podían ser trazados a viajeros internacionales. En esta fase, se prohibió el funcionamiento de Clubes y Centros de Día de adultos mayores y las visitas a los Establecimientos de Larga Estadía para Adultos Mayores (Eleam). Además, todos los funcionarios públicos que tenían desde 75 años podían realizar su trabajo de forma telemática si así lo deseaban.

Más tarde en el mes, se iniciaron las cuarentenas preventivas obligatorias para las personas de 80 años, las que se extendieron en el mes de mayo a las personas de 75 años. Esta medida prohibía la libre circulación de las personas mayores en todo el territorio nacional, por lo que el llamado desde el Minsal era a “solo salir si es estrictamente necesario”. Luego, en julio, las personas mayores de 75 años podían salir dos veces al día, por un periodo de dos horas, en horarios previamente determinados. Finalmente, dos meses más tarde, se levantaron estas restricciones, por lo que las personas mayores de 75 años quedaban sujetas a las mismas restricciones y libertades que cualquier persona, dependiendo de la fase del plan “Paso a Paso” que estuviera la comuna donde residían. Leer sobre esas medidas dos años más tarde, parece algo lejano: no hay que olvidar que el riesgo de contagio (cuando aún no existían las vacunas para el virus) era tan grande, que las personas simplemente no podían salir a la calle, especialmente las personas mayores.

Así como las personas mayores de 60 años esta vez vivieron una pandemia, también han vivido varios cambios que han acontecido no solamente en Chile, sino que mundialmente. En estas últimas décadas han existido muchos fenómenos históricos y sociales que afectan la forma en que se viven las vejeces. Pero, aun así, las personas mayores demuestran una gran resiliencia: se adaptan, contribuyen, se mantienen vigentes. Por eso, en este mes dedicado a las personas de 60 años y más va nuestro reconocimiento como sociedad: agradecemos su contribución, su resiliencia y su experiencia a través del curso de sus vidas. Ustedes son, sin lugar a duda, la base de las sociedades modernas.