Alejandro Mihovilovich Gratz
Director de Biblioteca Municipal
Investigador del Archivo Histórico de Concepción

Julio Escámez Carrasco nació el 15 de noviembre de 1925 en Antihuala, Los Álamos, Provincia de Arauco. Comienza sus estudios artísticos en la Academia de Bellas Artes de Concepción. A los 17 años fue ayudante de Gregorio de la Fuente en la pintura mural “Historia de Concepción”, fresco ubicado en la antigua estación de ferrocarriles, hoy salón mural de la Intendencia de Concepción.

Terminó sus estudios en la Escuela de Artes Aplicadas de la Universidad de Chile, para formar parte en 1948 de un grupo neorrealista junto con José Venturelli, Pedro Lobos, Carmen Silva y el boliviano Solón Romero.

Asumió funciones como docente en dibujo y pintura, gráfica y pintura mural en la Sociedad de Arte de Concepción, entre 1953 y 1958. De sus cursos surgieron numerosos pintores y grabadores de proyección nacional, de la talla de Eduardo Vílchez, Santos Chávez y Pedro Millar.

Viajante empedernido, alternó su tiempo de docencia y creación con visitas a lugares que integró paso a paso a la visión del mundo que formó como artista. A fines de la década de 1960 fue el momento de los grandes murales en Concepción, Talcahuano, Coronel y Lota, y es cuando recibió el encargo de realizar los murales de la Municipalidad de Chillán, sobre la temática del proceso de industrialización y mecanización de los procesos de producción liberadores para el hombre del trabajo pesado y alienante. Obra destruida a comienzos de 1974 por orden del gobierno de la época. A raíz de este episodio, Escámez partió al exilio en Costa Rica.

Hasta ese momento se había desempeñado como profesor del Instituto de Arte de la Universidad de Concepción.

Hay pocos artistas significativamente ligados a nuestra ciudad que hayan dejado huella como Julio Escámez, donde su obra se mezcla con lo público y cotidiano, dejando muestras de su pintura mural en algunos lugares de la Región, los que han sufrido los más diversos avatares del deterioro y de la destrucción, fortuita o programada. Entre sus obras destacan “Historia de la medicina”, fresco ubicado en la otrora farmacia Maluje de Concepción, y murales realizados en la escuela México en Lota. También, cuando se demolió el edificio del Liceo Enrique Molina, se destruyó el mural “El hombre ante el micro y macrocosmos”. Por mucho tiempo, sus restos permanecieron entre los escombros.

Sus obras han quedado dispersas a lo largo de sus viajes, algunas de ellas se encuentran en el Museo Nacional de Bellas Artes de Chile, Museo Punjab de India, Museo de Arte Contemporáneo de Belgrado y en la Galería Academia de Berlín, por nombrar algunos.

En Costa Rica, realizó una extensa labor creativa como grabador, pintor y muralista. Desde 1974 fue profesor de la Escuela de Artes Plásticas de la Universidad Nacional de Heredia y, desde 1976, asesor honorario del Ministerio de Cultura del Gobierno de ese país, para la restauración y conservación de los monumentos nacionales y patrimonio artístico. También fue invitado a México y España para realizar exposiciones de pintura de mayor formato. En 1996 se llevó a cabo una extensa exposición retrospectiva de su obra más importante en el Museo de Bellas Artes en Santiago.

Julio Escámez es una de las figuras más relevantes de la plástica regional de la segunda mitad del siglo XX, quien a través de su obra contribuyó a fijar hitos de nuestra realidad y condición humana local, traspasando límites nacionales, y siendo portavoz de valores más universales del hombre. Falleció el 23 de diciembre de 2015 en San José de Costa Rica.