Cristian Maldonado
Doctorado en Administración, Magister en Finanzas, Magister en Planificación y Gestión Tributaria. Master en Negocios, Magister en Ciencias Económicas y Administrativas

Hoy un tema muy sensible, bien recibido por trabajadores y no por empresarios, y que curiosamente resulta que podría no ser necesariamente el mejor proyecto presentado (a menos que se mejore) y tal vez haberse desechado un real proyecto de indemnizaciones que si beneficiaba a los trabajadores y que no era tan dañino para los empresarios, fue aquel proyecto que propuso el ejecutivo el año 2019 respecto a la materia.

Entender el efecto de las indemnizaciones significa considerar muchas variables, porque las situaciones de cada trabajador y empresa son muy diversos, pero una primera aproximación es que hoy los trabajadores son más inquietos en la búsqueda de oportunidades laborales y estancarse en un trabajo por la indemnización de años de servicio no es un tema interesante; respecto de aquellos con más de 11 años de trabajo a un empleador, y seguir ahí, es muy interesante aumentar el límite de 11 años, pero muy dañino para las empresas que en sus flujos tienen internalizado el máximo legal, distinto es si la regla aplica desde que es ley, porque una ley que compense a quienes llevan muchos años trabajando es una ley que entra a afectar de lleno el bolsillo de Pymes y grandes empresas o finalmente el empleador tendrá que hacer un gallito con su trabajador para que este se vaya solito, la consecuencia es la exposición a riesgos de tipo laboral por no estar trabajando a gusto y sólo hacerlo a la espera de ser despedido y recibir la muy bien ponderada indemnización por años de servicios.

En cambio, si fuera a todo evento y al 50%, como era el antiguo proyecto, por cada 2 años de trabajo tendría derecho a un sueldo completo, e independiente del tiempo trabajado recibirá una indemnización y si lleva trabajando muchos años y se quiere ir, se irá recibiendo la indemnización cuando él o la empresa quieran y no se estará de brazos cruzados porque no hay posibilidad de que lo despidan y se tiene que ir sin nada.

Frente a lo anterior, la pregunta que surge es si al legislar están pensando en los trabajadores y/o en las empresas, porque el actual proyecto beneficia al trabajador que lleva más de 11 años y no a los nuevos trabajadores, pero daña a los flujos de la empresa, y con el antiguo proyecto se podría decir que es el mejor de los mundos en el empate entre trabajador y empresa, quienes no se tienen que mirar las caras para discutir la indemnización, frente a eso yo me inclino por la antigua propuesta, porque si le agregamos proyectos de gratificaciones, eliminación de exenciones, sueldo mínimo, etc. algo ocurrirá con los trabajadores y empresas, por eso invito a quien presenta los proyectos a consultar y buscar lo mejor para todos.