Oscar Ferrel Bustos
Jefe de División de Infraestructura y Transporte

La dramática crisis climática global baja a la región del Bío-Bío, con preocupaciones acerca de la disponibilidad de agua, la intensificación de las heladas, el aumento de temperaturas y del nivel del mar.

La nueva administración regional, encabezada por el Gobernador Rodrigo Díaz, cree que es urgente, tomar medidas para convertir la crisis en oportunidad. Estudios de la Facultad de Ingeniería UDEC, dan cuenta que en el futuro enfrentaremos un descenso significativo de la pluviosidad en el centro y centro sur de Chile. Ante ese escenario es probable, que la actividad forestal, predominante en la zona centro sur del país, tenga que ir desplazándose hacia la Araucanía, los Ríos y los Lagos. No es irreal entonces, amparados en el clima y los puertos de la región, pensar en un secano productor de vinos de alta calidad, cerezas, berries, almendras, higos, trufas, avellanos, semillas, hierbas endémicas y otros cultivos de alto valor nutritivo, que se cosecharán en pleno invierno del hemisferio Norte, enfrentando condiciones preferentes de intercambio comercial.

Los nuevos tiempos nos exigen, para validar nuestro sueño exportador forestal y alimentario el incorporar trazabilidad desde el origen en la producción de bienes. También replicar el uso de IOT e IA en el uso del agua como lo ha hecho Nueva Zelanda, generando una gobernanza público privada a través del análisis y monitoreo de cuencas hídricas. Es por esto Telecomunicaciones, debe ser parte integral de esta visión, donde los sectores más intensivos como el forestal y el agro deban mancomunar una visión con los puertos y el desarrollo territorial, para generar un marco que direccione y favorezca los esfuerzos de escalamiento, encadenamiento y sinergias, innovación, transformación digital y trazabilidad.

Este sueño regional necesita una mirada desde la región de las OOPP, donde el Gobernador Regional, tal como se solicitó en el encuentro de Gobernadores recién pasado, pueda declarar de interés público, proyectos que garanticen una red vial y ferroviaria inclusiva, con una resiliencia que nos mejore la calidad de vida, garantizando tiempos de viaje, asegurando la calidad de los productos, incorporando territorios rurales a la producción, disminuyendo la huella de carbono, electrificando las redes de transporte público, fomentando el uso del ferrocarril para la carga y potenciando la transición energética hacia una matriz libre de combustibles fósiles.