El dilema de la reapertura de las escuelas

28 de Abril 2020 | Publicado por: Diario Concepción
Fotografía: Felipe Sepúlveda López

Felipe Sepúlveda López
Jefe Departamento Fundamentos de la Pedagogía
de la Facultad de Educación UCSC

El anuncio del Ministerio de Educación para organizar un inminente regreso a clases en medio de la actual crisis sanitaria provoca opiniones encontradas en la comunidad educativa. Por un lado, existen padres y docentes muy preocupados por el evidente riesgo que esto significa en términos de generar focos de contagio dado que mantener los estándares de distanciamiento social entre los educandos puede ser una tarea prácticamente imposible. A esto se suma, a que sabemos que el inicio de la actividad escolar involucra que los servicios de transporte privados ( furgones escolares) y públicos (metro, colectivos y autobuses) deben estar operando de manera regular soportando altas tasas de ocupación en los horarios punta. Esta situación se verifica todos los años en los llamados “Súper Lunes” en marzo donde se espera una alta congestión en las rutas más transitadas. Es evidente que este no es el escenario que se espera en medio de una pandemia por Covid-19 y justifica la gran preocupación de todos los actores que de una u otra manera se vinculan con la operación de las escuelas en Chile.

Por otra parte, sabemos que a pesar de los esfuerzos desarrollados por el Ministerio y docentes la educación desde casa presenta múltiples desafíos y no logra reemplazar el proceso de aprendizaje que ocurre en el aula. Es probable que muchas familias no cuenten con el espacio físico, materiales adecuados y posibilidad de que exista un adulto en casa que pueda guiar el proceso de aprendizaje de los estudiantes. Además, muchas escuelas en Chile no solo son responsables de la enseñanza de los objetivos de aprendizaje definidos en el curriculum, además son fundamentales en entregar un apoyo nutricional y, en muchas ocasiones, psicoafectivo que muchos estudiantes no tienen en sus casas. Lamentablemente, una vez más, son los estudiantes que provienen de familias desfavorecidas los que se encuentran más afectados por toda esta situación y en muchas ocasiones en sus escuelas encuentran un ambiente seguro y de contención que no existe en sus propios hogares.

Sin duda, la reapertura de los colegios involucra una decisión muy difícil. A pesar de reconocer la importancia que los estudiantes asistan a los colegios para continuar con su desarrollo académico, en esta decisión debe primar un criterio sanitario que pueda disminuir la posibilidad de riesgo de contagios masivos. Así, va a ser muy importante mirar con atención cuáles son las medidas propuestas desde el Ministerio de Salud para comenzar con este proceso de reapertura de los establecimientos educativos. Del mismo modo, es importante una adecuada utilización de los datos territoriales relativos a tasas de contagio y recuperación.

Por último, es necesario reconocer que la amenaza del virus, al parecer, nos va a acompañar por lo menos en los próximos 18 meses hasta los dos años. Este es el tiempo que tardaría en generar y poner a disposición una vacuna a nivel de la población mundial. Me imagino que nadie se ha planteado suspender por todo ese tiempo la operación de las escuelas. Tarde o temprano, la reapertura de los colegios será una realidad debemos estar preparados para poder responder a nuestros estudiantes que más lo necesitan.