Paola López Freire
Licenciada en Enfermería
Académica Facultad de Medicina UCSC
A partir de un comunicado de la Organización Mundial de la Salud sobre la escasez de equipos de protección personal por el aumento de la demanda a consecuencia del pánico, se hace necesario reflexionar sobre el peligro de los trabajadores de la salud en todo el mundo, frente a la atención de personas con Coronavirus y otras enfermedades infecciosas como influenza, entre otras.
Considerando que la OMS solicita aumentar el 40% la producción y suministro de estos equipos, para que el personal de salud se proteja y pueda atender a los enfermos infectados, es prudente evitar contagios aplicando “medidas de prevención”.
Pero, ¿qué sucede a la hora de hacer deportes al aire libre? Es responsable determinar si la persona que realiza deportes al aire libre presenta signos o síntomas de alguna enfermedad respiratoria como tos, coriza y/o dolor de garganta. En estos casos se recomienda que permanezca en su hogar y prevenir el contacto con otras personas, sin olvidar que debe limpiar y desinfectar la casa especialmente cocina y baños, aumentar el flujo de aire y la ventilación de la vivienda.
Cabe destacar que siempre que una persona tenga fiebre, tos y dificultad para respirar, es necesario que sea evaluado por un profesional de medicina, ya que puede deberse a una infección respiratoria o a otro problema grave. Los signos y síntomas respiratorios con fiebre pueden tener diversas causas y dependiendo de antecedentes de viajes, el Coronavirus podría ser una de ellas.
Ahora bien, si realizamos deporte al aire libre, también podemos y debemos colaborar en la prevención del contagio de enfermedades respiratorias, aplicando medidas de autocuidado básicas y de bajo costo como lavado de manos con agua y jabón, toser o estornudar sobre un pañuelo de papel o en el codo, evitar tocarse la cara, los ojos, la boca y la nariz, evitar los cambios bruscos de temperatura, mantener alimentación balanceada rica en frutas y verduras, e hidratación.
Finalmente, todos somos responsables en la prevención del contagio de enfermedades respiratorias. Entonces, es deber mantenernos informados y respetar indicaciones de los profesionales de la salud que siguen los lineamientos y protocolos de las autoridades de salud de nuestro país. Evitar caer en el pánico a través del respeto y responsabilidad hacia mi persona y el entorno; la situación es delicada y debemos colaborar.