Las no tan buenas segundas partes
09 de Octubre 2019 | Publicado por: En el Tintero
Se ha probado que no siempre es así, pero tal parece que, en la mayoría de los casos, resulta cierto: las segundas partes nunca fueron buenas. Tardíamente lo descubrió el empeñoso comandante Mensun Bound, director de la Expedición del Mar de Weddell, quien, con la cola entre las piernas, ha expresado lo siguiente: “como Shackleton antes que nosotros, quien describió el cementerio de su barco “Endurance’”como la peor porción del peor mar del mundo”, hemos fracasado.
Efectivamente, los cuidadosos y bien provistos planes de esta moderna expedición se vieron superados por el rápido movimiento del hielo, el cual había sido descrito por Shackleton como “las malvadas condiciones del mar de Weddell”. La expedición de Bound tenía precisamente como objetivo buscar el Endurance, el barco de tres mástiles, que quedó atrapado en el hielo de ese mar traidor de la Antártida y triturado lentamente, hasta que se hundió en noviembre de 1915.
La expedición consiguió llegar al lugar del naufragio a comienzos de esta semana, al mismo lugar al que accedió Frank Worsley, el sufrido capitán del Endurance, hace 104 años, pero las condiciones meteorológicas extremas obstaculizaron la búsqueda. “El tiempo se encerró y las condiciones del hielo marino se deterioraron, ocasionando la pérdida del AUV7, uno de los avanzados vehículos subacuáticos autónomos, que estaba siendo utilizado para localizar el naufragio”, según el informe de los expedicionarios.
Bound jura volver, sin fijarse en gastos, salir de allí le costó harto menos que los dos años de pesadilla de Shackleton para llevar su gente de vuelta a casa. Hay obligaciones morales, duras, pero obligaciones igual.
PROCOPIO