Como se ha esparcido el rumor que este planeta nuestro está en las últimas, se han renovado los intentos de salir de aquí, rumbo a otro lugar que depredar. Han aparecido, como otros viajeros espaciales, los hindúes, quienes han logrado poner en órbita lunar una nave espacial, la cual dará varias vueltas antes de aterrizar en la superficie de la Luna. Si tienen éxito, la India será el cuarto país en alunizar, después de EE.UU., Rusia y China, todos con la ambición de ir al infinito y más allá.

En un hecho aparentemente inconexo, la Nasa informa que ha detectado un asteroide que viaja a unos 40.000 km/h, que llegaría por estos lados el año 2029, ante esa eventualidad se prepara un equipo para estudiar el movimiento de la roca, ya que la proximidad estimada al llegar es de unos inquietantes 30.500 km, una distancia parecida a los satélites de televisión.

Este enorme peñasco ha sido bautizado como Apofis, de la mitología griega “El Dios del Caos”, un nombre que no parece particularmente optimista. La pregunta es obvia; saber de las posibilidades de impacto directo. Dicen que no, aunque tampoco saben si al llegar cambie trayectoria por algún fenómeno gravitacional que modifique la órbita de Apofis, sin descartar que venga con malas intenciones.

No será la primera vez que nos pasa, se piensa que la Luna es un pedazo de la Tierra que salió disparado después de un choque tremebundo en tiempos olvidados. No hay para que descartar que por ahí, por el espacio, se haya sabido de nuestras aviesas intenciones migratorias y se haya tomado la decisión de borrarnos del mapa por reiterada mala conducta planetaria.

PROCOPIO