A la hora de saber cuándo nos vamos

29 de Enero 2019 | Publicado por: Procopio

La idea del progreso de la ciencia es una excelente idea en general, pero de pronto parece de dudosa conveniencia, de tal manera que hay inventos que han cambiado el mundo para bien y otros que lo han dejado peor que nunca, con la posibilidad cierta de borrarlo de la galaxia, inventores incluidos, un muy insatisfactorio consuelo.

Una de estas dudosas contribuciones proviene de una universidad británica con el jubiloso comunicado, urbi et orbe, que están  trabajando en el desarrollo de un software que pueda decirle a las personas con exactitud el tiempo que les queda de vida, el artilugio requiere la completa y fidedigna relación de  datos y algoritmos, para que el programa pueda determinar de una forma clara y precisa cuáles enfermedades pueden afectar nuestra longevidad.

Es la forma más solapada de sacarnos el piso, nuestra íntima convicción de que somos inmortales hasta que no se pruebe lo contrario, la prueba concluyente de este convencimiento profundo es que si nos preguntan sobre la posibilidad de abandonar este mundo,  siempre diremos que será otro día, seguramente tan lejano que no vale la pena afligirse.

Los orgullosos creadores de tan escalofriante algoritmo dicen que traerá muchos beneficios; además de preparar a las personas para el día final, nos ayudará a tomar decisiones de largo plazo ya sean financieras o de cualquier tipo. Están convencidos que habrá filas de interesados, aunque es harto más posible que no se hagan tan famosos como esperan, ya que muchos de nosotros preferiría no  saber a ciencia cierta cuando nos apagarán el televisor.

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