Más mujeres al poder

Lucas Serrano Barraza
Académico de Administración Pública
Universidad San Sebastián

Con el fuerte impulso del movimiento feminista, y la tramitación de la agenda de género potenciada desde el gobierno, como nunca nuestra sociedad está hablando de la desigualdad entre hombres y mujeres. Salarios, condiciones laborales, estereotipos y exigencias sociales son algunas de las áreas en que existe una fuerte brecha y desigualdad entre ambos sexos. Sin embargo, otra arista que vale la pena evaluar es la representación política, donde existe una escasa participación de mujeres.

En el año 2015, junto con la reforma al sistema binominal, se les exigió a los partidos políticos presentar un mínimo de 40%  de candidatas mujeres en las elecciones legislativas, lo que se conoce como la ley de cuotas. Esta modificación permitió que nuestra última elección parlamentaria tuviera el mayor número de candidatas mujeres en nuestra historia, logrando aumentar la representación femenina en el congreso del 15 al 23%.

Gracias a esta exigencia, todos los distritos electorales de la Región del Bío Bío (19, 20 y 21) cuentan con una mujer electa parlamentaria. No obstante, ellas solo corresponden al 23% de toda la representación en la cámara baja de la Región (solo 3 mujeres de 13 diputados). Así, aun cuando estos resultados son positivos y  se asemejan a los resultados nacionales, demuestra la gran brecha que sigue existiendo en la representación política entre ambos sexos.

Esta diferencia se acentúa más cuando tomamos la última elección municipal, la que no está considerada en la ley de cuotas que rige para las elecciones parlamentarias. En ese sentido, si esta exigencia hubiese corrido para esa elección, solo el 17% de los partidos políticos la hubieran cumplido. Es más, solo el 19% de las candidaturas a alcalde y el 31% de las candidaturas a concejales correspondieron a mujeres. En el caso de la Región del Bío Bío estos números se acentúan, ya que solo el 28% de las candidaturas a concejales y solo el 10% de las candidaturas a la alcaldía eran de mujeres. Esto deja a nuestra región como la segunda con menos porcentajes de aspirantes a los concejos municipales (solo detrás de la Región de Tarapacá), y la con el menor porcentaje de mujeres candidatas a la alcaldía. Esta baja participación femenina trajo paupérrimos resultados, ya que solo el 4% de las alcaldías de la Región quedó en manos de mujeres, y solo el 17% de los concejales electos en la Región son mujeres.

Por lo tanto, dado que como sociedad vamos a comenzar a cambiar nuestras leyes para disminuir la brecha entre ambos sexos, se necesita un mayor espacio de participación femenina en política. Se necesitan sus opiniones y visiones para que estas nuevas condiciones sobre las cuales se está legislando sí representen las demandas y el sentir de las mujeres de nuestro país.