Nadie queda indiferente cuando se habla de las AFP, tanto así que un reciente informe de "Big Data de Prensa" señala que fueron el principal tema en los medios en julio, y como era de esperar José Piñera el personaje más nombrado, más que la Ministra Blanco o la Presidenta.
Muchas de esas menciones son posteriores a la memorable entrevista de Astorga, quien perdió una de esas oportunidades únicas para consagrarse en el mundo de las comunicaciones. Pero volvamos a Pepe, un personaje misterioso, distanciado de su familia, tan inteligente como su hermano menor y que aún Chile no termina de conocer.
No sabemos si vive aquí o afuera, tampoco a qué se dedica ni de qué vive, sólo que apareció en Chile para defender "el modelo". Es importante señalarlo, porque ninguno de los ejecutivos de la industria ha respaldado sus declaraciones, por lo que podemos inferir que no está haciendo una defensa corporativa a las AFP, sino más bien al Sistema de pensiones. Cuando repitió incansablemente en TVN la frase que la pensión promedio era de $650.000 para quienes cotizaban por 35 años o más, no estaba mintiendo, es así. La pregunta que no hizo Astorga y que muchos esperábamos era ¿Qué hay que hacer para que el promedio tenga pensiones cercanas a esa cifra? La respuesta es fácil, llevarla a la práctica es lo complejo: cotizar por 35 años o más.
Hay que hacerle modificaciones al sistema y eso está claro, como le enseñaron a Pepe en Harvard eso es una trivialidad, porque todos están de acuerdo. Los expertos coinciden en los ajustes: edad de jubilación, porcentaje de cotización, comisiones de las administradoras, entre otras. Pero ninguna apunta a fomentar que los chilenos ahorremos. ¿Qué pasaría si se le otorga algún beneficio tributario a las empresas que decidan aportar voluntariamente a la cotización de sus trabajadores? Habrían listas de espera para trabajar ahí.
Sigamos con Pepe. Si su fin de estar en Chile es defender el modelo yo me pregunto a cuántos habrá logrado convencer de que el sistema es bueno. No nos engañemos, no deben ser muchos. Lo que ha logrado Piñera es endurecer posiciones: los partidarios se volvieron más partidarios y los opositores lo mismo, aportó a polarizar un poco más nuestra sociedad.
Soy partidario del sistema de capitalización individual, porque creo que el Estado debe estar para apoyar a quienes realmente lo necesitan, pero defensas como la de Pepe no hacen más que acrecentar el descontento de los chilenos con el modelo y las AFP.