El grupo yihadista Estado Islámico se adjudicó el atentado en el concierto del Manchester Arena, Reino Unido, según la agencia Amaq.
Afirmó que “un soldado del califato” puso “varios paquetes bomba” en varias concentraciones de “cruzados” en la ciudad británica.
La misma agencia de propaganda del grupo ultrarradical, afirmó que detrás del ataque hay un “equipo” de combatientes.
El ataque dejó a 22 muertos y a 59 heridos, entre ellos a varios menores de edad durante la presentación de la cantante estadounidense, Ariana Grande.
De acuerdo a la policía de Manchester, el autor del ataque murió al detonar un artefacto explosivo. Sin embargo, las autoridades detuvieron a un hombre de 23 años en conexión con este atentado, el más mortífero en el Reino Unido desde el 2005.