Las comidas caseras son muy reconfortantes en los días fríos y lluviosos de invierno y, además, la sabia naturaleza nos provee en esta estación de los alimentos apropiados para mantenernos sanos y fuertes, por lo que lo mejor es hacerle caso y agregar a nuestra dieta preparaciones que contengan:
Cebolla y ajo, que poseen propiedades antisépticas y ayudan a recuperarse de enfermedades respiratorias.
Zanahoria, que aporta vitamina A para mantener la piel en buen estado y, además, fortalecer las mucosas, ayudando a prevenir enfermedades respiratorias.
Acelgas, espinacas y endivias aportan betacarotenos, fibra y ácido fólico para ayudar a la regeneración de tejidos.
Las coles –repollo, coles de Bruselas, coliflor y brócoli- entregan antioxidantes valiosos para fortalecer las defensas.
Lo mismo aportan los cítricos como naranjas, mandarinas, limones, toronjas y kiwis. Las de color naranjo tienen además betacarotenos, que están en la película blanca que las cubre bajo la cáscara, por lo que es bueno no descartarla.
El pescado, las nueces y la chía contienen omega 3 que, entre otras cosas, permite combatir las inflamaciones.
La yema del huevo, el salmón, la sardina y el atún aportan vitamina D, que suele disminuir en nuestro organismo por la ausencia de sol.
El agua siempre es una necesidad y se mantiene la recomendación de consumir 2 litros diarios, que pueden ser en forma de infusiones calientes y té.