Cáncer oral en Biobío

Un diagnóstico temprano puede marcar una gran diferencia ante una enfermedad física pero de alto impacto emocional interno y familiar.

El cáncer sigue siendo uno de los grandes problemas de salud que debe enfrentar la sociedad. Es una de las más complejas y de paso afecta de manera muy aguda al entorno más cercano de quien lo padece.
 
Anomalías bucales como úlceras que no cicatrizan en 15 días, manchas blancas, rojos u oscuras, tumores en la mucosa asociados a dolor, problemas para mover la lengua o tragar son, según especialistas locales, los primeros signos de un cáncer oral.

 
Según el último informe emitido por la Seremi de Salud, en los últimos 2 años la patología ha cobrado la vida de 72 personas en la Región, 28 de ellas en 2023 , registrándose una tasa de mortalidad de 1,7 personas por cada 100 mil habitantes.

 
El seremi de Salud, Eduardo Barra, afirmó que si bien el carcinoma oral tiene una menor frecuencia que otros como el de pulmón, próstata, mama o gástrico, contabilizando 1,68 casos por 100 mil habitantes, lo más probable es que esa cantidad sea mayor y que exista un subdiagnóstico, pues la gente no tiende a consultar a un médico y mucho menos a un odontólogo en forma preventiva.

 
Precisamente, debido al diagnóstico tardío, según dijo, la letalidad de la enfermedad puede llegar hasta un 50%. “Por eso ya hay patólogos orales en los servicios de salud y por ende se está empujando el diagnóstico precoz”.

 
Milly Yáñez, presidenta de la Sociedad de Patología Bucomaxilofacial de Chile, aseveró que debido al diagnóstico tardío la sobrevida de un paciente con un cáncer oral puede ser menor a 5 años. Agregó que es un cáncer muy invasivo que se puede diseminar con facilidad.

 
Paulina Cubillos, docente de la Facultad de Odontología, del departamento de Patología y diagnóstico de la Universidad de Concepción, recalcó que el más común de los cáncer oral es “el escamoso, que se origina en la capa más superficial de la mucosa oral y que se asocia a factores etiológicos como el consumo de tabaco en sus distintas formas, fumar cigarro, pipa o masticar y que se potencia con otros factores asociados como el consumo de alcohol, mala higiene y malnutrición”.

 
Por eso, una vez más, el llamado es al cuidado y actitud preventiva. Un diagnóstico temprano puede marcar una gran diferencia ante una enfermedad física pero de alto impacto emocional interno y familiar.