Si bien la serie de discursos siempre llegan a la buena intención, lo cierto, es que al parecer todo se diluye en la práctica diaria.
El estado, cuidado e integración de los adultos mayores es un tema recurrente cada vez que se registra algún hecho de alto impacto que tiene relación con estos.
Si bien la serie de discursos siempre llegan a la buena intención, lo cierto, es que al parecer todo se diluye en la práctica diaria.
Se ve en las calles, en las instalaciones de acceso a espacios públicos y privados, y se dimensiona todavía más por medio de la evidencia derivada de los números.
De la población total de la Región del Biobío, de más de 1 millón de personas, 329 mil 740 son adultos mayores. De ellos 1.770 se encuentran ingresados entre los 65 Establecimientos de Larga Estadía para Adultos Mayores (Eleam).
Dos de estas instituciones pertenecen al Estado y son administradas por el Servicio Nacional del Adulto Mayor (Senama), quién le otorga apoyo a todos los hogares reconocidos a través de diversos programas.
Según un estudio de Diagnóstico Regional realizado por Senama, el 49 % de los adultos mayores ingresados en Eleam tiene un grado de dependencia severa, y un 31 % con dependencia leve moderada. “También hay algunos casos donde son personas autovalentes, pero en general la mayor parte requiere algún tipo de apoyos y cuidados”, señaló Janine Albarrán, coordinadora regional de la institución.
Dentro de los hallazgos, el Senama detectó que en la Región hay 418 adultos mayores que se encuentran abandonados por sus familias en los Establecimientos de Larga Estadía. En este sentido, el 58% de los recintos poseen a personas en esta condición.
“Hay una necesidad de fortalecer los vínculos familiares, porque aún cuando los Eleam brindan servicios de cuidados, la vinculación con las familias y el entorno es fundamental para el bienestar y la calidad de vida de los residentes”, dijo Janine Albarrán.
Estos tipos de casos son los que hacen pensar en que las intenciones siguen siendo mucho más fuertes que la puesta en ejercicio.
Un asunto que preocupa, entonces, mucho más y cada vez más. Es que al parecer la sociedad en su conjunto sigue acumulando deudas con los adultos mayores, aquellos que aportan con la cuota de experiencia y cariño en cualquier comunidad.