Restricción del uso del celular en establecimientos educacionales
18 de Agosto 2024 | Publicado por: Editorial Diario Concepción
Para un niño o niña, estar en un dispositivo puede ser de ayuda para sus deberes académicos, pero también perjudicial para fomentar conductas como el sedentarismo.
Hace unos días, la Cámara de Diputados aprobó en particular una iniciativa que prohíbe el uso de teléfonos celulares al interior de recintos educacionales para menores que asisten a educación parvularia y para aquellos que cursen entre 1° a 6° año de enseñanza básica. Una normativa que también plantea un “uso adecuado y gradual” para los estudiantes de 7° y 8° básico, al igual que para aquellos de enseñanza media. Si bien falta para que se transforme en ley- fue remitida al Senado para su segundo trámite legislativo-, lo cierto es que pone en el tapete una temática que hace tiempo se viene conversando, que es la utilización de dispositivos sobre todo en los más pequeños.
En lo medular, el texto establece que se prohíbe el uso de medios tecnológicos de telefonía móvil en el nivel parvulario de enseñanza y desde 1° a 6° básico. Sin embargo, se permite un uso de carácter excepcional en la medida que sea estrictamente requerido en una actividad curricular o extracurricular. También en situaciones como un alumno que posee necesidades educativas, en casos de emergencia o desastre o donde el alumno presente una enfermedad o condición de salud que requiera monitoreo a través de celulares.
El seremi de Educación, Carlos Benedetti, se refirió a las principales recomendaciones para aplicar este tipo de medidas: “Específicamente entre los 12 y 18 años se recomienda su uso sólo en caso que sea necesario para cumplir fines pedagógicos, pudiendo explorar la perspectiva crítica de los contenidos, aspectos éticos asociados y el uso creativo que pueda darse, fomentando la autonomía en relaciones de confianza”.
Sin dudas, la evolución y desarrollo tecnológico tiene muchísimas cosas positivas que pueden aprovecharse en beneficio de la educación, pero también hay aspectos con lo que se debe tener cuidado. Por ejemplo, enChile los indicadores de actividad física en la población infantil son bajos, y hay hace tiempo una preocupante tendencia al sedentarismo y a la obesidad. Igualmente, el uso continuo de pantallas también afecta a la visión y también es muy común que niños y niñas requieran lentes a corta edad.
Por eso, independiente de una ley, es importante que la comunidad escolar y el entorno de cada niño sea responsable con el uso de los artefactos tecnológicos.