Mínimo que tengan luz

24 de Febrero 2024 | Publicado por: Editorial Diario Concepción
Fotografía: Archivo Diario Concepción

Detrás de este tipo de fallas, se termina generando en las personas un sentimiento de abandono. “No hay un interés en la población insular y eso es sumamente preocupante”.

Lo que viven los habitantes de Isla Mocha parece no tener fin. Si no es el transporte que los une con el continente, es la falta de atención de salud u otro problema que les aqueja por su separación marítima y, por lo visto, debido a la falta de consideración por las entidades públicas o privadas encargadas de cumplir con las obligaciones que les permitan a los isleños vivir más alejados.

Esta vez se trata de la ausencia de energía eléctrica. Un suministro básico que, si pasa lo mismo en el Gran Concepción, se encienden las alarmas y es solucionado rápidamente. Pero, no pasa lo mismo con la Isla Mocha.

En julio de 2023 fueron más de 14 días sin suministro, y en marzo de 2021 también ocurrió lo mismo y por más tiempo. Estos son los eventos de los que se tiene conocimiento público ya que justamente con la falta de energía las comunicaciones con el continente se vuelven más complejas.

Este 2024, desde el 15 de febrero la isla dejó de contar con el servicio de energía eléctrica lo que para los vecinos es tristemente una demostración de la fragilidad en la que viven constantemente.

La presidenta de la Junta de Vecinos de Isla Mocha Sur, de Lilian Vera, señaló que “estos cortes de energía afectan enormemente a la isla porque se pierde la cadena de frío, donde mucha gente perdió sus productos congelados, también el tema de telefonía, en este momento ya hace ocho días que estamos sin señal telefónica”.

“Lamentablemente esto se ha ido repitiendo en el tiempo, se ha vuelto ya casi una costumbre para los mochanos, si bien el municipio está a cargo en estos momentos de la generación eléctrica, creo que no es la entidad responsable, aunque ellos traten de hacer lo mejor posible, ya que es un particular el que arrienda el generador, pero creo que él es el que hay que presionar y tiene que informar y dar una explicación”, agregó la misma representante vecinal.

Detrás de este tipo de fallas, se termina generando en la población un sentimiento de abandono. “No hay un interés en la población insular y eso es sumamente preocupante”, dijo la vecina.

Preocupante no debería serlo tanto para los vecinos, inquietante sí para quienes deben ocuparse de que las familias isleñas no sientan esa discriminación. Mínimo que tengan luz o ¿Es mucho pedir?