Plan tiene como uno de sus objetivos acelerar el despliegue de hidrógeno verde en aplicaciones nacionales clave para 2025, y entrar al mercado de exportación idealmente en 2030.
En 2020, el Gobierno presentó un Plan de Acción de Hidrógeno Verde, que tiene entre sus principales objetivos convertir a Chile en líder mundial de producción y exportación de este energético. Hace unos días hubo un importante avance en esta estrategia, con la designación de los integrantes del nuevo Comité Estratégico de Hidrógeno Verde.
11 fueron las personas seleccionadas, entre quienes destacan la expresidenta Michelle Bachelet, el exministro de Energía y Minería, Juan Carlos Jobet, y Marcela Angulo, directora de la Unidad de la Universidad de Concepción en Santiago. El plan se desarrolla en base a cuatro ejes: impulso de la industria y retribución social, infraestructura habilitante, carbono neutralidad y off-takers nacionales y sostenibilidad y valor local.
José Miguel Benavente, vicepresidente ejecutivo de Corfo, entregó detalles del actual estado del programa que busca impulsar el H2V y los alcances que tendrá para la Región. Destacó el aporte en infraestructura y capital humano que puede entregar Biobío para esta industria, y explicó la idea de cómo las actuales zonas de sacrificio como Coronel pueden pasar a transformarse en territorios donde se produzca hidrógeno verde.
Además, Benavente señaló que “los números nos muestran algo así como que el 75% de la producción se exportaría y un 25% se quedaría en Chile, y es aquí donde entra la Región del Biobío. Ese 25% está orientado al consumo interno en el país de sectores tradicionales como la minería; el área agrícola; el sector forestal u otros, que utilizan intensivamente energía y que, en el caso muchas de ellas, es generada con combustibles fósiles. La idea es hacer la transición, de alguna manera, al uso de hidrógeno en sus procesos productivos”.
El vicepresidente ejecutivo de Corfo comentó también que “otro mecanismo es la producción en sí de hidrógeno verde. La Región del Biobío tiene potencial eólico y podría generar grandes cantidades de hidrógeno verde que podría utilizarse en la demanda interna de empresas regionales y utilizando la infraestructura de puertos que tiene actualmente, para exportar, por ejemplo, amoníaco por el Océano Pacífico”.
Ante las repercusiones del cambio climático, sin dudas que es relevante poder avanzar en proceso que permitan generar energías más limpias, y en este caso la Región cuenta con muchas características que le permitirán ser importante en este proceso que se realiza a nivel país.