Mientras no exista un verdadero cambio en la forma de ver y entender el aparato estatal, incluso el privado, esto no quedará en nada más que eso: un día cualquiera del calendario.
El Día de las Regiones. Eso es lo que se conmemora durante esta jornada a nivel nacional o en todas las regiones si se quiere leer de otra manera. Desde 2009 que se instaló esta efeméride nacional, o multiregional, y que hasta ahora parece que sólo queda en eso: una fecha marcada con destacador en el calendario y nada más.
Es que la batalla por la descentralización sigue vigente y el peso de la toma de decisiones desde la capital se siente todos los días del año.
Si bien el Estado en su conjunto durante décadas se ha comprometido a una implementación importante y seria de un sistema descentralizado en la práctica eso no ha ocurrido y sólamente aparecen algunos tibios intentos o acciones que buscan generar la imágen de un país con facultades regionales propias e independientes de lo que ocurre en Santiago.
Para algunos, el esfuerzo regionalista y cumplimiento de promesa se traduce en la creación de más regiones, como lo acontecido con Los Ríos o Ñuble en los últimos años, pero lo cierto es que eso solo contribuye a engrosar el listado de las provincias fuera de la Región Metropolitana, ya que el resultado sigue siendo el mismo: ante cualquier idea, duda, consulta, emergencia, es la voz de la capital la que debe llegar a ordenar la mesa con la correspondiente mirada ajena y distante de la realidad local, que queda rezagada.
La composición de la Convención Constitucional es, quizás, una de las apuestas regionalistas que tuvo atisbos de consideración territorial ya que. por su naturaleza. vimos como los representantes electos por y desde las regiones, hicieron sentir mucho el sentido de pertenencia en el debate público. Aunque de ahí a un cambio, no hay mucho, entendiendo el resultado del proceso que no pudo materializar esa discusión regionalista, tras el rechazo por medio del voto popular.
Seguramente hoy habrá muchos discursos sobre la conmemoración de este Día de las Regiones. Repaso histórico, balances en materia vial, compromisos, y el repaso biográfico de uno que otro personaje importante de matiz militar, poético o deportivo darán sustento a aquellas palabras.
Pero mientras no exista un verdadero cambio en la forma de ver y entender el aparato estatal, incluso el privado, esto no quedará en nada más que eso: un día cualquiera del calendario.