Costo de la reconstrucción: trabajo y fuerza público-privada

Hace un mes que la Región del Biobío sabe de noticias que en su mayoría están ligadas a los incendios forestales. Semanas intensas, de alto desgaste emocional. No solo para las víctimas o afectados indirectos, también para el resto de los involucrados como los equipos de emergencia.

Son semanas completas donde día a día se actualizan y recalculan todo tipo de afectaciones. Desde las casas quemadas, hasta las cabezas de ganado muertas o con riesgo de alimentación. Por supuesto que también el número de personas que perdieron la vida en medio de la catástrofe.

Ahora se conoce un nuevo dato. Si la semana pasada el ministro de Hacienda, Mario Marcel, estimaba que el costo de la reconstrucción será de unos US$300 millones entre todas las zonas afectadas, la cartera proyecta que en el Biobío ese monto será de unos US$140 millones.

Sebastián Rivera, seremi de Hacienda, basado en los mismos cálculos realizados por el Ministerio en Santiago, proyectó que “el costo aproximado de la reconstrucción en la región del Biobío llega a los 140 millones de dólares”. Esto es, casi la mitad de lo proyectado para el país.

En este sentido, el seremi de Hacienda explicó que “es un cálculo sobre el costo por hectárea quemada que son cerca de 200 mil en la Región”.

Respecto de los costos de la reconstrucción a nivel nacional, Rivera detalló que un 39% se destina a financiar el combate a los incendios, otro 39% a la reconstrucción de casas afectadas, un 16% en ayudas a sectores productivos y un 6% a otros aspectos.

“En este sentido, lo que podría proyectar como costo en la Región del Biobío podrían significar alrededor de US$ 54,5 millones en cuanto al costo del combate de los incendios y otros US$ 54,5 millones en lo que es reconstrucción, más US$ 22,4 millones en lo que son ayudas y en el ítem otros, serían unos US$ 8,4 millones los que se podrían proyectar”, agregó el seremi.

La ejecución de la reconstrucción obviamente es importante y un deber del Estado. Pero para poder llegar a ello primero es vital poder ordenar los recursos. Dineros que incluso el mismo Ministerio espera que procedan desde el Fondo Nacional donde la participación privada será clave por medio de donaciones, las que conllevan beneficios tributarios. Estado y empresas deben hacerse fuertes en una sola hoja de ruta.