El Consejo Regional (Core) del Biobío acaba de hacer un reciente llamado a “terminar con la violencia de género”. Esto ,tras el último femicidio ocurrido en Coronel.
Se trató del asesinato de Estela Vega, cuyo caso quedó al descubierto el 24 de diciembre pasado, con la detención de su marido, René Jiménez, quien se encuentra en prisión preventiva tras ser formalizado por el femicidio de su esposa.
Una postura clara y pública por parte de un estamento del Estado. Y claro, muchos podrán decir que no es la primera vez que un organismo estatal se refiere y rechaza la violencia de género, pues es un mensaje recurrente por parte del poder Legislativo y Ejecutivo.
Pero lo diferente en este caso es que pocas veces se ha visto que un Core exprese esta posición de manera transversal y publicitada.
“Las últimas semanas han sido para todas y todos los habitantes de la Región del Bíobío, de consternación, a raíz de los hechos de público conocimiento acaecidos por la violencia de género, nuevamente, una nueva mujer ha sido asesinada en nuestros territorios. Solidarizamos y acompañamos desde lo más profundo de nuestros corazones a la familia de Estela Vega, por esta gran pérdida y a todas, quienes han perdido sus vidas por ser mujer”, detalla el Consejo Regional, a través de una declaración.
“También manifestamos nuestro desacuerdo con el caso de Antonia Barra en donde la falta de justicia ha permitido que se mantenga la impunidad de Martín Pradenas y la revictimización de la familia, esperamos por tanto que esta situación se revierta y pueda ser condenado por la nueva Ley de Suicidio femicida, en pro de la dignidad de la familia”, amplía la información oficializada a Diario Concepción por la consejera regional, Javeira Vargas, quien es presidenta de la comisión de Mujer y Equidad de Género, del Consejo Regional del Biobío.
Todo esto genera las condiciones para hacer un llamado a todos los órganos del Estado a seguir sumándose a esta voz de repudio contra la violencia de género. Una voz que debe ser activa, preventiva y fuerte, pues poco efecto puede llegar a tener una vez que se consuman hechos de alto impacto como el ocurrido en Coronel.