Incendios forestales en el Biobío: más prevención

Es de esperar que el trabajo de estos días sea el necesario para terminar con estos siniestros, y que las tareas de prevención resulten totalmente para no volver a repetir este ambiente de incertidumbre en la próxima gran fecha familiar y conmemorativa: el Año Nuevo.

Las últimas horas han estado marcadas por la tensión y ansiedad en algunos puntos de nuestra Región, producto de incendios forestales que, sobre todo en el caso de Chiguayante, han estado cerca de sectores residenciales.

Un evento de estas características siempre es ingrato ante los ojos de todos, pero esto se agudiza todavía más cuando ocurre en un contexto como el de este fin de semana: Navidad.

Es que decenas de familias tuvieron que, forzosamente, cambiar la atención hacia el avance del fuego y con ello las columnas de humo.

El sonido de las conversaciones alrededor de la mesa, y los abrazos, quedaron desplazados por el ruido de los motores de los carros de bomberos y las unidades aéreas necesarias para este tipo de tareas.

En resumen son Chiguayante, Hualqui, Laja y la Ruta 160 que une a San Pedro de la Paz con Coronel, los grandes puntos de preocupación. En este último, a diferencia de los otros tres, el fuego no afectó un bosque sino una empresa papelera.

Hasta hace unas semanas atrás la propia Corporación Nacional Forestal (Conaf ) daba cuenta de cómo se preparaba el uso de los recursos para esta temporada.

Según lo informado por el director regional de entidad, Rodrigo Jara, la entidad maneja un presupuesto que bordea los $8.300 millones, lo que permite el combate de siniestros vía terrestre y área.