Desafíos pendientes en materia de inclusión

La gran jornada de la solidaridad chilena ha finalizado felizmente, con la meta nuevamente cumplida, a pesar de ser cada vez más ambiciosa, desde la primera Teletón en 1978, con una recaudación de 84 millones de pesos equivalentes a 5 millones 500 mil dólares, a esta última, que recaudó más de 33 mil millones, 47 mil 500 dólares, en valores actualizados. Todo el país ha recibido un mensaje de justificada esperanza en cuanto a su capacidad para unirse en metas nobles y superiores.

Sin embargo, la necesidad y la magnitud del apoyo que se requiere no permiten concebir resultados episódicos, por elevado que sea su impacto. De acuerdo al último Estudio Nacional de la Discapacidad, el 16,7% de la población de 2 y más años se encuentra en situación de discapacidad, es decir, 2 millones 836 mil 818 personas, un informe que cuantifica la discapacidad de un modo más integral, de acuerdo a la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, enfocándose no sólo en su condición de salud, sino también en temas como inclusión laboral, participación e identificación de brechas o diferencias con respecto a la población sin discapacidad.

La encuesta en cuestión convierte a Chile en un país pionero a nivel mundial en la aplicación del modelo diseñado con un enfoque de derechos humanos, de acuerdo a la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad y representa una radiografía que permitirá desarrollar políticas públicas, ya que aborda la discapacidad desde una mirada integral, incorporando un análisis de la persona sobre la relación con su ambiente, su vida personal, su condición de salud y su desempeño logrado en distintos ámbitos de la sociedad.

Las mediciones realizadas en adultos y niños permiten estimar que el 16,7% de la población de 2 y más años se encuentra en situación de discapacidad, es decir, casi tres millones de personas. Cifra que puede ser desagregada en un 20% de la población adulta que está en situación de discapacidad, 2.606.914 personas y el 5,8% de la población discapacitada de 2 a 17, es decir, 229.904 personas. De esa manera, el grupo de mayor prevalencia, considerando toda la población, corresponde a las personas de 60 años y más, con un 38,3%.

En términos generales, los resultados del estudio muestran que la situación de discapacidad está estrechamente relacionada con el envejecimiento de las personas, en las proporciones siguientes; 18 a 29 años 7,1%, 30 a 44 años 11,3%, 45 a 59 años 21,7%, 60 años y más 38,3%. Varía igualmente, de más a menos, según el nivel de ingresos- el primer quintil muestra casi doble de la frecuencia del quinto-, o por género, la población discapacitada femenina corresponde al 24,9% y la masculina 10,6%.

En nuestra región, existe un 18,3% de población con discapacidad, que corresponde a poco más de la media nacional. Muchas de estas personas tienen dificultades para participar activamente en el mercado laboral, en mayor o menor medida, según la severidad de su condición, y es esa una barrera que puede ser modificada positivamente y una de las acciones faltantes, aquella que sigue o acompaña la rehabilitación, devolver a las personas su dignidad como aporte valioso e insustituible de la sociedad. Es una tarea ardua, pero indispensable, lo que la Teletón está haciendo, aunque mucho, no basta.